La semana sin competición que ha tenido el Deportivo le ha servido al equipo coruñés para recuperar a casi todos los futbolistas de cara al encuentro del domingo en el campo del Guijuelo. Derik Osede es la única baja segura para ese compromiso. El central sigue de baja por culpa de una rotura de fibras en el sóleo que se produjo ante Unionistas.
Eneko Bóveda y Salva Ruiz, que se perdieron las dos últimas jornadas, ya se entrenan con normalidad a las órdenes de Fernando Vázquez y estarán a disposición del técnico para entrar el sábado en la lista de convocados. También está mucho mejor de sus molestias en la rodilla Borja Granero. Durante las últimas semanas, el zaguero ha estado entrando y saliendo de la dinámica del grupo y, de hecho, fue suplente ante el Coruxo. El que es duda para medirse al Guijuelo es Valín. El canterano está terminado de recuperarse de un esguince de tobillo y habrá que ver cómo evoluciona en los próximos días para saber si puede viajar a tierras salmantinas. Por último, el entrenador está atento al trabajo de Rolan para decidir si tiene el tono físico adecuado para formar parte de la expedición blanquiazul que viajará el sábado a Salamanca para jugar el domingo en Guijuelo.
REGRESO DE BORGES
El centrocampista ha estado concentrado con la selección de Costa Rica pero ya está en A Coruña. Borges disputó dos amistosos con su combinado nacional, el segundo el lunes en Eibar ante el País Vasco (derrota 2-1 de Costa Rica).
El duelo estará marcado por el césped artificial, algo que influye no sólo a los jugadores de campo, tal y como reconoce Carlos Abad: “Sobre todo en el tema de golpeos. A la hora de defender un tiro, el balón rueda diferente, un bote más picado.. cambia bastante”, reflexiona el meta deportivista.