La razón por la que el Atlético hoy ha jugado con blazalete negro y que tiene que ver con Badajoz

Este domingo, el Atlético de Madrid lució brazaletes negros en su victoria (1-2) frente al Sevilla. Los jugadores rojiblancos mostraron esta señal de respeto en homenaje a un exdirectivo del club fallecido a los 90 años, que no solo fue un dirigente clave durante la presidencia de Alfonso Cabeza (1980-1981), sino que también tuvo una destacada trayectoria pública. Esta insigne figura destacó e política como ministro de Sanidad y Seguridad Social bajo el gobierno de Adolfo Suárez y fue diputado por Badajoz en las Cortes Generales. Su vinculación con la capital pacense fue estrecha, ya que representó a la provincia en el Congreso durante años, dejando una huella política y social en la región.

Enrique Sánchez de León Pérez nació en Badajoz, el 9 de junio de 1934. 

Fue una figura clave en la transición española. Tras especializarse en Derecho Sindical, ingresó en el Cuerpo Superior de Inspectores de Trabajo (1960-1971), desempeñando delegaciones en Orense, Málaga y Guipúzcoa. En 1971 fue procurador en las Cortes nacionales, y con la llegada de la democracia, ocupó cargos relevantes como Director General de Ordenación de la Seguridad Social y Director General de Política Interior (1976-1977). En 1977 fue nombrado Ministro de Sanidad y Seguridad Social en el gobierno de Adolfo Suárez, impulsando la modernización del INSALUD. Fue Diputado por Badajoz en las Cortes Generales por UCD, consolidando su vínculo con Extremadura. Tras la disolución de la UCD, se unió al CDS de Suárez.

Etapa en el Atlético de Madrid

En 1980 y 1981, fue vicepresidente primero del club durante la presidencia de Alfonso Cabeza y en 1987 se presentó como candidato a la presidencia, aunque no logró el cargo.

Reconocimiento en Badajoz

Mantuvo una importante relación con con su ciudad natal que lo nombró Hijo Predilecto en reconocimiento a su labor política y su defensa de los intereses extremeños. Tras dejar la política, fundó su propio despacho de abogados, manteniendo su influencia en el ámbito jurídico y empresarial.

Sánchez de León fue un hombre puente entre la política, el fútbol y Extremadura, dejando un legado en todas estas esferas. El Atlético, en reconocimiento a su legado, guardó un minuto de silencio antes del encuentro y sus jugadores portaron el brazalete negro como gesto de respeto. Un detalle que une, una vez más, la historia rojiblanca con la de Extremadura.