“Crisis sin precedentes”, “unidad de gobierno rota”, “humillación”... Con estas y otras expresiones el portavoz municipal de Compromís, Sergi Campillo ha definido en las últimas horas la decisión de los miembros del PSPV-PSOE en la comisión de investigación de la EMT sobre el fraude de 4 millones de euros, de votar ayer tarde con la oposición (PP, Ciudadanos y Vox) para que el concejal Giuseppe Grezzi, (Compromís) máximo responsable de la EMT no esté presente cuando comparezcan miembros de la empresa en esa comisión investigadora.

Campillo considera que esta postura de los socialistas ha provocado "una crisis en el gobierno local sin precedentes", ya que supone la "ruptura de la unidad de actuación con consecuencias graves, algo que no había ocurrido hasta ahora desde junio de 2015".

Insiste Sergi Campillo en que el PSPV "ha decidido que es más beneficioso para sus intereses partidistas alinearse con la extrema derecha de Vox y la derecha de PP y Ciudadanos para humillar a un concejal de Compromís y vetarlo sistemáticamente en determinadas comparecencias de la comisión de investigación".

Por su parte, el grupo socialista, a través de la presidenta de la comisión, Elisa Valía considera que "no existe una crisis de gobierno, sino una crisis en la EMT que tenemos que solucionar juntos", por lo que ha pedido prudencia ante cualquier diferencia que pueda surgir en la comisión de investigación sobre la gestión de la crisis ocurrida en el seno de la empresa de transporte.

Desde el PSPV-PSOE consideran que ningún trabajador "tiene que verse forzado a solicitar que se ausente su jefe y que lo prudente es que éste abandone la sala en el momento de la comparecencia, sin necesidad" de que se lo pidan.

"Tenemos que trabajar de manera conjunta para esclarecer los hechos y estar a la altura de la exigencia que como partidos políticos debemos tener en la gestión de los recursos públicos", han indicado los socialistas, que han hecho un llamamiento a la responsabilidad y la prudencia "porque existe una crisis en la EMT, pero no una crisis de Gobierno".