El Ayuntamiento de València ha empezado esta mañana a retirar los patinetes eléctricos de la ciudad, tras el plazo de 24 horas que le dió a la empresa para que procediera a su retirada de la vía pública. La policía local ha empezado a retirar los patinetes del paseo marítimo -había 9-, y después por la zona del centro. En ese momento ha aparecido una furgoneta de la empresa para llevárselos, pero finalmente ha cambiado de opinión y los ha dejado por lo que ha sido la policía local la que finalmente se los ha llevado.

Una actitud que desde al Ayuntamiento no ven con buenos ojos, porque aseguran no ayudará a la hora de negociar el permiso con el consistorio.

En total, la sanción propuesta es de 750 euros por cada grupo de patinetes retirados, a lo que hay que añadir otros 122 euros por la misma causa. Cada día que pasen en el depósito, el Consistorio cobrará a la empresa 1,05 euros por cada aparato.

Por su parte, el alcalde de Valencia Joan Ribó ha recordado que el espacio público es de todos, y hay normas muy claras que impiden que en estos momentos, mientras no haya el equivalente a una licencia, se puede utilizar la vía pública en esta dirección" y al respecto ha advertido que
cualquier actividad económica que se realice en el espacio público ha de tener permiso de actividad”