De Kazan llegó la tercera

Cuando se es el mejor, normalmente queda demostrado. Eso fue lo que le pasó a Valencia Basket en 2014. Era el equipo más destacado de la Eurocup y, pese a algunas piedras que tuvo que sortear durante el camino, terminó rebasando la línea de meta en primer lugar y con cierta distancia respecto a sus perseguidores.

Después de dos interminables fases de grupos llegaron las rondas eliminatorias en la Eurocup, la hora de la verdad. Y por las cosas del destino a Valencia Basket parece que alguien le asignó Rusia como destino predilecto. Tres veces tuvo que viajar al lejano país para dirimir esta competición. La vez más complicada fue la primera, en los octavos de final. El rival era el Khimki moscotiva y tras vencer por 16 puntos de diferencia (75-59) en la Fonteta, daba la sensación de que el trabajo ya estaba hecho, pero ni mucho menos. Un choque durísimo a domicilio sólo lo pudo resolver una canasta postrera de Pau Ribas que dejó la derrota en -15 (97-82) y el pase por los pelos a los cuartos de final.

Valencia Basket logró lo que nadie ha conseguido: tres Eurocups. Y ya lleva cuatro

Curiosamente fue relativamente más sencillo en cuartos y en semifinales. Ante el Alba de Berlín, el equipo que entrenaba Velimir Perasovic pasó por encima (86-54), sin opciones de sorpresa en la vuelta, pese a perder (78-73) y frente al Nizhny Novgorod, triunfos aquí (84-75) y allí (53-79).

Así que Valencia Basket se metía en su cuarta final de la Eurocup que también se disputaba a doble partido ante un viejo conocido. El Unics Kazan entrenado por el italiano Andrea Trincheri ya había sido rival de los 'taronja' en la primera fase de grupos de la competición. En la Fonteta, Valencia no dio opción a la incertidumbre, llegó a tomar una ventaja de 33 puntos y cerró el partido con un triunfo cómodo (80-67) y un Justin Doellman soberbio (28 puntos). La tercera estaba cada vez más cerca.

Aquel equipo del que a día de hoy sólo se mantienen en plantilla Bojan Dubljebvic y Sam Van Rossom, contaba con gente tan contrastada como el propio Pau Ribas (ahora en el Barça), Rafa Martínez (en Bilbao), Vladimir Lucic (en Bayern de Munich) o los ya retirados Romain Sato, Sergei Lischuk o el propio Doellman.

En el choque definitivo, Valencia volvió a ser mejor, pese al empuje del Basket-Hall Arena de Kazan. Hace hoy seis años el equipo ganaba de nuevo a Unics (73-85) y conseguía algo inédito: su tercer título de Eurocup, privilegio que sería capaz de agrandar en 2019 con un nuevo trofeo. Con Doellman (26 puntos y 34 de valoración) como MVP, con Dubljevic como mejor joven, con Lischuk enfundado en una senyera valenciana y con Perasovic esbozando una sonrisa, se lograba la clasificación para la Euroleague ante el reconocimiento de todo el viejo continente.