Guedes se dispara y hace bueno el plan del Valencia CF

La decisión de apostar, el pasado verano, por la continuidad de Gonçalo Guedes llevaba su riesgo. El futbolista portugués llevaba dos temporadas consecutivas dando unas prestaciones muy bajas en el Valencia CF, tanto dentro como incluso fuera de los terrenos de juego. Totalmente desconectado del club, en baja forma y con unos números impropios de un futbolista de su precio y calidad, el nombre de Guedes se había marcado en rojo dentro del club: su venta se había convertido en una prioridad.

El jugador luso era, con diferencia, el futbolista que mayor desproporción presentaba en cuanto a salario, amortización, rendimiento e implicación. Tres temporadas atrás, el club había pagado 40 millones de euros por él al PSG, convirtiéndolo en la operación más cara realizada en toda la historia del Valencia. Una cantidad por la que todavía quedaban por amortizar en torno a 21 millones. Su salida era tan necesaria como evidente. Pero la realidad del mercado llevó a la entidad de Mestalla a optar por otro camino. Durante el verano, tan solo llegaron dos ofertas formales a las oficinas por él: una del Sevilla FC y otra del Villarreal CF. Dos propuestas económicas que, tras ser estudiadas, no lograban satisfacer las necesidades del club.

Por ello, desde la parcela deportiva se confirmó al entrenador que Guedes se quedaría. Algo que satisfizo a José Bordalás. El técnico alicantino mostró en privado su convencimiento de poder revalorizar al futbolista bajo su tutela. Y Guedes se quedó para lograrlo. Seguramente, a sabiendas que éste sería el último tren que pasara para volver a demostrar, todo lo que se presuponía de él un tiempo atrás: talento, velocidad, potencia en el disparo y gol. Un futbolista desequilibrante que encandiló al valencianismo en sus dos primeras temporadas. El jugador que marcó el tanto que le dio a su país la Nations League. Precisamente, otro de los motivos que sirvió a Guedes para darse cuenta de su mal momento fue, su ausencia en las últimas convocatorias de Portugal. Hasta en su propio país llegaron a dudar de su nivel de forma.

Pero el curso 21-22 le ha cambiado. Sus números y sus actuaciones así lo dicen. Esta está siendo su temporada más completa en la élite. Su cotización se ha disparado, hasta el punto de igualar nuevamente, su cifra más elevada. Según Transfermarkt, Guedes tiene un valor de mercado de 40 millones de euros. Su pico más elevado, el mismo que alcanzó en enero de 2018 con el Valencia CF. Para que se entienda mejor: hace solo un año, Guedes tenía un valor de mercado de 15 millones de euros según este mismo portal. Disputó un total de 2500 minutos (el séptimo de la plantilla), repartidos en 34 partidos disputados (29 como titular) y en los que anotó siete goles, repartiendo otras siete asistencias.

A sus 25 años, el delantero luso atraviesa el mejor momento de su carrera. Lleva 13 goles y cinco asistencias. Es protagonista en el juego del equipo. Bordalás lo ha ubicado como punta, evitándole el sacrificio de tener que jugar pegada a la cal. Y le ha salido bien. Excelente. Su protagonismo es tal, que un gol suyo valió para clasificar al equipo para la final de la Copa del Rey. Y en el Valencia se frotan las manos. El plan estratégico del club pasa por volver a poner en el escaparate a Guedes (junto a otros compañeros como Cillessen o Maxi Gómez) y escuchar ofertas a partir del final de la temporada. Este verano quedará 13 millones de euros para amortizar su fichaje.

Esta noche tiene una cita con el Mundial. Portugal se enfrenta a Turquía. Si se clasifica, tendrá un último cruce contra el vencedor del Macedonia- Italia. Una nueva oportunidad para seguir brillando en el escaparate y su objetivo por llegar a Qatar 2022. Guedes ha vuelto y el Valencia ha recuperado su plan de negocio.