La victoria más importante de su carrera. Diego Sarabia se adjudicó ayer el Gran Premio Memorial Duque de Toledo en el Hipódromo de La Zarzuela, el más importante de la temporada de otoño. Lo hizo montando, además, a uno de los caballos de su propiedad: Chevalier Cathare.
Un caballo que ya había dejado su sello en pruebas como la Copa de Oro de San Sebastián, donde consiguió ser tercero, y que contó con la preparación de Enrique León. Fue la quinta de las carreras de una apacible mañana y que se disputó sobre hierba en 2.400 metros de recorrido.
Chevalier se une así a caballos del nombre de Farnesio, Revirado o Chacal. La carrera vino marcada por la buena posición de Finely Tuned y Navia, una de las grandes favoritas que a la postre se quedó, incluso, fuera del podio.
Este fue completado por The Way of Bonnie quien, montado por Václav Janácek, realizó un esprint final marca de la casa pero que no fue suficiente. El tercero de los puestos fue el conseguido por Tarantela, a cuyos lomos se encontraba Ricardo Sousa, con una estupenda monta en una carrera distinguida tanto por la sorpresa de Sarabia como por la belleza competitiva.
El otro Gran Premio del día, al esprint
1.200 metros era la distancia marcada para caballos y yeguas velocistas de tres años en adelante. En el 'Día de los Campeones', Kitty Marion, montada por José Luis Martínez y preparada por Guillermo Arizkorreta, se hizo con la victoria por solo una cabeza por delante de Stoweman. Completó el trío de ganadores United States, a más de dos cuerpos de los ganadores.