Lorena Okenve (24): "Me pidieron el DNI en el supermercado y no lo llevaba, enseñé el carnet de conducir con la aplicación de la DGT y tampoco servía"

La tiktoker Lorena Okenve ha compartido en [su perfil de TikTok] una 'cosa rarísima' que le sucedió recientemente en un supermercado. Según relata en un vídeo que acumula miles de visualizaciones, acudió a realizar una compra que incluía una botella de vino blanco, y al llegar a la caja la empleada le exigió el DNI para verificar su mayoría de edad, dando inicio a una situación que ha generado un amplio debate.

El carnet digital no es suficiente

Okenve, nacida en 2001, explica que llevaba 'la vida' sin que le pidieran el DNI, por lo que el requerimiento le causó risa en un primer momento. Sin embargo, la cajera insistió. Al revisar su monedero, se percató de que no llevaba el documento físico, por lo que ofreció una alternativa: '¿te sirve el carnet de conducir?', preguntó.

Ante la respuesta afirmativa de la empleada, Lorena procedió a mostrarle su permiso de conducir a través de la aplicación oficial miDGT, un formato que permite llevar la documentación en el móvil y que es legalmente válido. 'Es la aplicación de la DGT', le indicó. La respuesta de la cajera fue tajante: 'Ya, bueno, yo no sé qué es eso', afirmó, negándose a aceptar el documento digital.

Un 'no' rotundo y por duplicado

Ante la negativa, [Lorena Okenve] llamó a su novio, que se encontraba fuera del establecimiento, para que entrara y pagara él con su documentación. Para su sorpresa, él tampoco llevaba el DNI físico, aunque sí su carnet de conducir. En ese momento, la cajera llamó a su supervisora para consultar la validez de la app, pero la decisión fue la misma.

Ni a ella ni a su novio, de 27 años, les permitieron comprar el vino. La justificación fue que 'la botella es de ella y no sé si es mayor de edad'. El novio de la joven, que trabaja como portero de discoteca, argumentó sin éxito: 'A mí lo que me piden es que verifique que la gente es mayor de edad. Si te estoy enseñando mi carnet y ves que soy del 98, ¿por qué no me lo vendes a mí?'. La respuesta del personal fue que 'ya hemos tenido problemas antes' con adultos que compran alcohol para menores, una política interna para evitar responsabilidades.

La intervención de la tía: '¿Por qué a ella no y a mí sí?'

Frustrados, la pareja se fue sin el vino y contó lo sucedido en su comida familiar. Una tía de Lorena, que acababa de comprar cervezas en el mismo sin que le pidieran identificación alguna, se indignó ante lo que consideró un agravio. 'Cálate que nos volvemos a bajar', le dijo a su sobrina, dispuesta a comprobar si a ella le ocurría lo mismo.

La tía volvió al supermercado, cogió la misma botella de vino y pasó por la misma caja. Tal y como sospechaba, la empleada no le pidió ningún tipo de identificación. Fue entonces cuando decidió preguntar: 'Oye, mira, acaba de estar aquí mi sobrina con su novio y no les habéis querido vender esta botella. ¿Qué pasa?'. La cajera, nerviosa, reconoció a la joven.

Con un tono calmado pero firme, la tía defendió el derecho de su sobrina como consumidora: 'Mi sobrina ha venido aquí, ha querido comprar una botella de vino, ¿por qué no se le ha vendido? Te está enseñando una aplicación que es oficial y completamente legalizada, tal y como recuerda la propia DGT, y tú te niegas. Y a mí, sin embargo, no me pones problemas. ¿Por qué?'.

La trabajadora insistió en que la política de la empresa les obliga a exigir el DNI físico y que la aplicación no era un método válido para ellos. A pesar de entender la necesidad de corroborar la edad, a Lorena Okenve y su familia la situación les ha dejado un 'runrún', cuestionando por qué un documento legal es rechazado y por qué se aplica un criterio tan dispar entre diferentes clientes.