El juez ha decretado prisión para un hombre que fue detenido por los Mossos d'Esquadra como presunto autor de cuatro robos con violencia e intimidación que tuvieron lugar en 12 días --entre el 16 y el 28 de mayo-- en el distrito barcelonés de Nou Barris.

Los agentes identificaron rápidamente al ladrón --un delincuente multirreincidente "conocido por su violencia"-- después de que las víctimas aportaran la misma descripción.

El primer robo ocurrió el 16 de mayo por la tarde en un supermercado, cuando el ladrón --acompañado por otro hombre-- fue sorprendido por una trabajadora mientras intentaba llevarse dinero de una caja registradora: huyó con las manos vacías, pero antes de irse le hizo "un gesto de muerte" a la empleada.

El segundo fue el 22 de mayo al mediodía, cuando el ladrón --de nuevo, acompañado-- irrumpió en una farmacia y amenazó al trabajador con una barra de hierro para que le diera dinero de la caja registradora y no lo denunciara.

El 26 de mayo realizó el tercer hurto, en el que robó el teléfono a una mujer, que lo siguió y vio que entraba en un domicilio cercano: tras avisar a la policía, los agentes corroboraron que ahí vivía el principal sospechoso.

Y dos días después, de madrugada, el ladrón --acompañado de dos otros hombres-- amenazó con un hacha a un taxista para que le diera todo su dinero.

DETENIDO EN ABRIL

En abril, los Mossos d'Esquadra ya detuvieron al pregunto autor, de 35 años, por otro robo violento en un establecimiento de alimentación cercano, y en marzo de 2018 fue objeto de una investigación por su implicación en la agresión de un joven que tuvo que ser operado.

En el momento en que los agentes quisieron detenerlo, sacó un arma de fuego simulada y se atrincheró en su domicilio, desde el que lanzó varios objetos a la policía hasta que fue detenido.