"Es una bomba de relojería que en cualquier momento va a estallar". Así definen la barriada de Las Viudas los agentes que se dedican a disuadir los conflictos que se multiplican en esta zona del barrio de Delicias. Según ha podido saber COPE, en las primeras horas del martes una nueva reyerta, y ya van dos en cuatro días, ha concluido con tres miembros del clan de los Píos detenidos y dos policías nacionales heridos.

Las alarmas saltaron cuando la Policía dio el alto de madrugada a un coche que, en lugar de detenerse ante el requerimiento de los agentes, emprendió la huida. El conductor, que según ha podido saber COPE no dispone de carné de conducir, esquivó los controles, lo que motivó una persecución policial. Durante la misma, según ha relatado Elena Muñoz, miembro del Sindicato Profesional de la Policía Municipal, los detenidos llegaron a rebasar ocho semáforos en rojo a "gran velocidad". Además, una patrulla que se había situado en la carretera para tratar de interceptar al conductor y el resto de ocupantes del vehículo hubo de sacar el arma reglamentaria e, incluso, efectuar un disparo al aire ante el riesgo de ser arrollados.

Cuando los agentes consiguieron interceptar el vehículo, ya en plena barriada de Las Viudas, los detenidos opusieron una "gran resistencia". Además, mientras se producían las detenciones, un grupo de vecinos, en su mayoría de etnia gitana, se enfrentó a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado profiriendo contra ellos "graves amenazas", según ha relatado el concejal de Seguridad y Movilidad en funciones, Luis Vélez. Una respuesta vecinal que se ha dado ya en anteriores ocasiones.

Se da la circunstancia, además, de que en esta misma barriada de Las Viudas, durante la pasada Nochevieja, se registraron disparos al aire en presencia de menores como, según relataron los propios implicados, parte de las celebraciones de fin de año.

Para Muñoz no cabe duda de que "no tienen ningún respeto hacia la Policía". "Están asalvajados", ha sentenciado. Ante esta situación el Sindicato Profesional de la Policía Municipal ha vuelto a pedir medidas concretas para poner fin a este tipo de actitudes.

Durante el registro del vehículo la Policía se incautó de una hazada metálica y de un cuchillo de 10 centímetros de hoja que estaba oculto en la guantera.