Con la llegada del nuevo año arrancarán las obras que darán vida a los dos ascensores que el Ayuntamiento de Valladolid ha proyectado en las laderas norte y este del barrio de Parquesol. Ambos elevadores estarán a pleno funcionamiento a finales de 2022 en el caso del ascensor de la ladera norte y en 2023 el de la ladera este. Este miércoles, la Junta de gobierno aprobará el presupuesto de licitación que asciende a siete millones de euros. Un impulso a la movilidad del barrio que permitirá además una comunicación más accesible con Arturo Eyries y Paseo de Zorrilla.

Hoy se ha presentado el proyecto de movilidad vertical en la ladera este de Parquesol, que comunicará este barrio con Arturo Eyries y permitirá una conexión más confortable hace el Paseo de Zorrilla. Se ofrece así una solución sostenible a los problemas de accesibilidad del barrio con mayor altitud de Valladolid, donde residen más de 26.000 habitantes. El proyecto, que salvará el desnivel de treinta metros con un ascensor inclinado, rampas y escaleras mecánicas a lo largo de un recorrido de 210 metros, tiene un presupuesto de casi siete millones de euros. Además de los mecanismos más avanzados en ingeniería, diseño y seguridad, se actuará medioambientalmente en todo el entorno.

Los residentes en esa zona próxima al Paseo de Zorrilla y la Avenida de Salamanca podrán acceder a equipamientos educativos (instituto y escuela municipal infantil), incluso podrán disfrutar de uno de los espacios naturales más singulares de Valladolid, el Parque de los Almendros.

Los Almendros

El Proyecto se ubica en el Parque de los Almendros entre la Calle Mariano de los Cobos y la Avenida de Salamanca, junto a la intersección con la Avenida Medina del Campo.

Gracias a la integración de los diferentes elementos mecánicos, permite mejorar la configuración actual del parque, con nuevos espacios verdes y zonas ajardinadas. Asimismo, se incorpora un elemento nuevo en el Paisaje ‘El Agua’. La incorporación de elementos de agua, junto con los juegos de luces y las pantallas led, harán del parque un nuevo punto de encuentro y zona a visitar por la integración de elementos innovadores con el entorno natural.

El proyecto incluye una zona de espacio y relax en el entorno de la Fuente en V, diseñada de forma que desde la parte inferior de la V discurra una cascada de agua bañando las letras, con luces y colores. Dispondrá del mismo modo de una zona de cortina de agua que puede ser atravesado por el viandante, gracias a un arco de metacrilato transparente.