La Junta de Castilla y León pedirá amparo al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) para limitar las reuniones de personas entre la una y las seis de la mañana.
El Gobierno autonómico quiere poder restringir estos encuentros a un máximo de seis asistentes, tanto en interiores como en exteriores. Con el fin de “evitar un aumento de los contagios”, ha justificado el portavoz de la Junta, Francisco Igea, en entornos que consideran “menos” seguros para el cumplimiento de las medidas de prevención frente al COVID-19.
De este modo pretenden poner fin el trasvase del ocio a los domicilios una vez cierren los locales de hostelería, cuyas terrazas podrán permanecer abiertas hasta las 01:00 horas al rebajarse al Nivel 3 la alerta sanitaria. Pero también disuadir a la ciudadanía de la celebración de botellones.
Al contrario que en anteriores ocasiones, la Junta de Castilla y León no publicará la norma para su posterior ratificación judicial. Si no que, al afectar a un derecho fundamental como es el de la libre circulación, solicitará una autorización previa al TSJ. “No queremos echarla a andar”, ha explicado Igea, “hasta que no tengamos autorización”.
El portavoz de la Junta ha desligado esta solicitud del partido de Liga que enfrentará al Real Valladolid y al Atlético de Madrid en la ciudad del Pisuerga, a la que se espera que acudan, según las previsiones de la Subdelegación del Gobierno en Valladolid, no más de 3.000 hinchas rojiblancos.
La Junta de Castilla y León aún no se ha dirigido al Alto Tribunal. Y no espera una resolución, al menos, hasta finales del mes de mayo.