Mayo es un mes de transición para sector hotelero y para los alojamientos en el medio rural. Las ocupaciones siguen siendo bajas aunque se consolidan entre semana, principalmente por que la actividad de las empresas no se ha detenido. Tímidamente se recupera además el fin de semana. Es el diagnóstico del presidente de los hoteleros de Valladolid, Francisco Posada, quien ha precisado que no superarán este mes la ocupación del 40 y el 50 por ciento frente al 80 ó 90 de épocas pre covid.

El primer cuatrimestre del año ha supuesto un ligero alivio en la ocupación, como ha explicado el propio Posada: “es verdad que la tendencia desde enero a abril ha ido creciento y cada vez un poco más”, si bien se ha mostrado confiado en que no se retroceda en esa tendencia: “lo importante es que no vayamos para atrás y tengamos un verano tranquilo”. La ocupación previa en plena pandemia ha rondado el 15 por ciento, pero confían en que en verano se sigan recuperando esos porcentajes.

Tanto hoteles como casas de turismo rural confían en que a partir del nueve de mayo se produzca un alivio de las restricciones y eso suponga una reactivación de la economía con la llegada de viajeros desde otras comunidades autónomas.

Luis Chico, gerente de Campo y Lumbre, ha explicado que se están recibiendo peticiones, pero sujetas a la políica de cancelación. “No podemos hacer fijas esas reservas y aún no sabemos sobre qué porcentajes nos movemos, si un 40 o un 50 por ciento”, “no sabemos qué va a pasar”, ha lamentado.