Segundo día de luto oficial en el país.

Cope Salamanca recuerda al párroco Alfredo Ramajo, fallecido por coronavirus el pasado 1 de abril.

Don Alfredo, era más que un párroco. Era un amigo, un gran amigo de cada uno de los vecinos y vecinas de El Maíllo. Don Alfredo tenía una presencia y una voz arrolladoras. Era campechano y alegre. Siempre tenía una sonrisa en su boca y un consejo para darte. Le gustaba ir de traje los domingos o días de fiesta y era taurino hasta la médula, no en vano era capellán del Bolsín Taurino de Ciudad Rodrigo.

En las fiestas de octubre del Rosario, a Alfredo lo veías en todas partes: presentando el pregón, el bingo, ayudando a preparar el almuerzo tradicional del escabeche y por supuesto, en todas las liturgias solemnes. Rodeado de todos: de mayores, niños y jóvenes. Su gran preocupación: la falta de relevo generacional en el pueblo y el empleo para los jóvenes.Pilar Montero Villarón, vecina de esta localidad, recuerda así a Don Alfredo.

En solo 9 días, y a los 66 años, el Covid 19 se lo llevó. Era natural de El Sahugo. Ordenado sacerdote en 1978.Ocupaba los cargos de Delegado de Enseñanza y Delegado de peregrinaciones en la Diócesis de Ciudad Rodrigo y junto, a Fernando Sánchez Tendero, era el Arcipreste de Yeltes.

Alfredo Ramajo, mi buen amigo, descansa en paz.