“El chocolate de los pobres”

Durante la Guerra Civil española fue uno de los alimentos básicos de la población, se utilizaba también para cebar al ganado y es que la algarroba, alimento derivado de las vainas del árbol del algarrobo (Ceratonia Siliqua) ha pasado de ser un alimento pobre consumido en tiempos de penuria a convertirse en objeto de deseo, reivindicado por afamados chefs. Un árbol resistente al calor, a la sequía y a los suelos áridos que crece en toda la costa mediterránea, desde la actual Turquía hasta la Península Ibérica.

La harina obtenida de sus semillas, denominadas garrofin, se emplea actualmente en la industria alimentaria para elaborar pasteles, cremas, tartas, bolsos, bizcochos y otros dulces, pues su sabor afrutado y ligeramente amargo recuerda al chocolate por lo que es un buen sustituto del cacao, tanto es así que se convirtió en el dulce de los niños de posguerra conocido como 'El chocolate de los pobres' pues entonces no había recursos para adquirir cacao de importación. Similar al chocolate, pero con mucha menos grasa pues tiene solamente un 1% de grasa frente al 15 ó 30% del cacao.

La algarroba es además rica en azúcares y minerales esenciales como el calcio, el magnesio y el potasio, resulta ideal para diabéticos por su bajo índice glucémico, ayuda a frenar el colesterol y a mejorar la digestión. Fuente excelente de antioxidantes, como los taninos y los polifenoles es muy valorada en la fabricación de cosméticos y productos farmacéuticos.

En la antigüedad la algarroba se utilizaba por sus propiedades edulcorantes y su sabor dulce, era considerada de tal importancia que los egipcios incluso incluyeron el símbolo de la algarroba en sus jeroglíficos para referirse a la dulzura, mientras que los griegos, que la denominaban κερ?τιον, curiosamente utilizaban su semilla como medida de peso, gracias a su uniformidad, ya que la semilla de la algarroba pesa 0,2 gramos de forma que se podía emplear para pesar piedras preciosas.

Un superalimento ancestral, una auténtica joya culinaria injustamente olvidada que cobra especial relevancia hoy en día, en un mundo que busca opciones mássaludables y sostenibles.

Silvia Rodríguez, colaboradora de COPE Bierzo

Silvia Rodríguez es colaboradora de COPE Bierzo desde el 24 de junio de 2019. La podréis leer y escuchar los lunes en la sección de opinión bajo el título ‘Silvia en COPE Bierzo’ y los fines de semana ‘Con otra perspectiva’. Todo ello en Cope.es/Bierzo.

Es licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de Salamanca, decidió estudiar esta carrera porque le apasiona la lengua y especialmente la literatura. Además, le encanta leer, escribir y escuchar buena música. Es feliz trabajando en equipo y entiende “que estamos aquí para ayudar y hacer felices a los demás”.

También es socia fundadora del Banco de Alimentos del Sil y colabora con esta ONG que realiza una gran labor en nuestra comarca. Enamorada de su profesión, la enseñanza. Es profesora de inglés, lengua y literatura en la Academia Corcal.

Se define como una persona vital, alegre, optimista y sobre todo con gran sentido del humor. Además, ha realizado el prólogo del libro ‘Chuma. El Valle del Silencio’ del andaluz Miguel Velasco Nevado.

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