Nos encontramos ante el primer desfile creado en la ciudad de Cuenca, con sede en el desaparecido convento de San Roque y compuesto por el “Paso del Huerto”, “Paso de la Caña”, “Soledad de Nuestra Señora” y “Jesús Nazareno”. En este mismo convento tiene sede la Hermandad de la Vera Cruz y Sangre de Cristo, fundada en 1525 quien, entre otras actividades, tiene encomendado el acompañamiento de los ajusticiados.

Las cinco hermandades se trasladan al Convento de San Francisco tras la destrucción de la ermita originaria. A instancias del Ayuntamiento en 1818 se trasladan a la Iglesia de San Antón, donde, con posterioridad, se creará la Archicofradía de Paz y Caridad.

A principios del s. XIX el lamentable estado de abandono en que se encontraba sumida la hermandad de la Vera Cruz y Sangre de Cristo obliga a las otras cuatro hermandades a asumir el cumplimiento de las obligaciones.

En 1849 se crea la concordia fundacional de la actual Archicofradía de Paz y Caridad uniéndose este año la hermandad del Ecce Homo.

En 1853 se incorpora a la misma la hermandad de Nuestro Padre Jesús atado a la columna.

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El comienzo del siglo XX encuentra la última referencia relativa al acompañamiento de un ajusticiado. Sería en 1903, corriendo por parte de la Archicofradía la encargada de la realización de la última comida del ajusticiado.

Tras la guerra civil, la reorganización de las diversas hermandades permiten la puesta en marcha de la Archicofradía de Paz y Caridad, compuesta por las siete hermandades que desfilan en la tarde del jueves santo correspondiendo a éstas el desfile del Santísimo Cristo de las Misericordias, titular de la Archicofradía.

La Diputación de Cuenca patrocina este contenido de la edición digital de La Voz de la Pasión