De Tomelloso al Cabo Norte en moto: una aventura de 21 días de 6 "reyes del asfalto" manchegos
Estos aventureros han recorrido 12.000 kilómetros para alcanzar el punto más al norte de Europa al que se puede llegar por carretera

Miguel Ángel Navarro, motero tomellosero
Ciudad Real - Publicado el
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21 días de viaje, 12.000 kilómetros y 16 países distintos. Todo ellos para alcanzar el punto más al norte de Europa al que se puede llegar por carretera: el Cabo Norte, en Noruega.
Es la aventura que acaban de concluir 6 amigos moteros de Tomelloso que, tras hacer realidad este sueño, ya están en casa.
Francisco Javier, Jesús, Miguel Ángel, Carlos, Juan y Vicente son los intrépidos tomelloseros que, tras años dándole vueltas a este viaje, decidieron poner fecha al mismo.
"En un principio éramos 10 o 12 personas, todo el mundo se apunta... y al final hemos sido solo seis los que hemos podido hacer el viaje" nos ha contado en COPE uno de estos aventureros, Miguel Ángel Navarro.
hasta 10 horas subidos en la moto
El viaje a Cabo Norte, uno de los límites que separan las aguas del Atlántico y del Ártico, llevó a estos 6 "reyes del asfalto" a cruzar casi toda la península ibérica y a pasar por Francia, Alemania, Holanda y Dinamarca, donde cogieron un ferry hacia Noruega. .
"Los cuatro primeros días tuvimos que hacer muchos kilómetros en moto. Hubo días de 9 y 10 horas subidos en la moto y alrededor de mil kilómetros porque queríamos llegar lo antes posible a Dinamarca para coger el ferry y cruzar a Noruega, que era el país que nos interesaba realmente recorrer" explica Miguel Ángel.

Moteros tomelloseros en Noruega
"Los fiordos, todo lo que es el este, el sur de Noruega... pues es lo más bonito, lo más paisajístico. Es impresionante recorrer en moto los fiordos".
Sobre las condiciones de las carreteras que encontraron por los países que recorrieron, este experimentado motero nos cuenta que hasta Dinamarca "todo perfecto, la mayoría lo hicimos por autovía y autopista". Y ya en Noruega, "que no pillamos ningún kilómetro de autopista", Miguel Ángel reconoce que tuvieron suerte, ya que "las carreteras están recién arregladas, muchas de ellas en obras, ya que el clima requiere que las arreglen porque se estropean por la nieve. Son carreteras preciosas, con muchísimos túneles. Hay algún túnel que llegamos a contar 21 kilómetros bajo el agua, bajo el mar, porque allí la infraestructura es impresionante".
5 días lloviendo sin parar... "¿Qué hago yo aquí?"
Teniendo en cuenta que pasaron por el círculo polar ártico, la climatología era una de las adversidades que los tomelloseros podían encontrar en su viaje... y así fue.
"Llegamos a tener cinco días seguidos de agua 24 horas y otros dos solo un tercio del día" cuenta Navarro. "Y cuando tienes que hacer seis, siete horas en moto a diez grados, lloviendo sin parar, hay momentos que dices: ¿qué hago aquí? Pero luego merece la pena. Te secas y sigues adelante".
Y respecto al trato que les daba la gente de los lugares en los que pararon, Miguel Ángel asegura que "cuando veían las matrículas de las motos ponían cara de incredulidad, nos preguntan, nosotros les contábamos el tema con el poquito inglés que controlamos... y lo que más me ha impresionado es el respeto que allí tienen por la circulación. No sé si será a las motos en concreto o a todos los vehículos en general, pero cuando a lo mejor ibas adelantándolos, incluso se apartaban para dejarte paso, sobre todo en lluvia, se apartaban para, imagino, que no tuviéramos ningún riesgo a la hora de adelantarnos o de cruzar el carril".

Moteros tomelloseros en el Artic Circle Center
Después de 21 días, regresando por un itinerario distinto que les llevó a pasar por Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, República Checa, Alemania, Austria, Suiza, Francia, los 6 amigos moteros ya están en Tomelloso con sus familias.
Y después de esta hazaña, ¿qué es lo siguiente?
"Lo hemos hablado" confiesa Miguel Ángel. "Hemos recorrido ya el norte de Europa, así que nos gustaría ahora recorrer el sur. Entonces se está hablando, pero de momento no. No es como ir a Cabo Norte, que es así un punto mítico motero que yo creo que todo aquel apasionado de las motos debería ir".