El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla- La Mancha, Emiliano García-Page, en un acto celebrado en la localidad de Tarancón (Cuenca) ha anunciado que se suprimirá la restricción actual existente de tener que guardar distancia entre las localidades, consistente en formar triángulos equiláteros entre los asientos, el llamado a tresbolillo. Justificaba esta decisión en los buenos datos actuales relativos a la pandemia así como el alto ritmo de vacunación entre la población.

¿Cómo afecta esto a la próxima Feria de Albacete? Pues la situación cambia de manera sensible ya que de un 50% de aforo con unas 4600 localidades asignadas para la venta al público, tal y como tenía previsto realizar la actual empresa gestora del coso, siguiendo a rajatabla lo que establecía la norma hasta ayer mismo, se contará en breve con un 75% real de aforo, es decir, sin ningún tipo de restricción.

Así, el pliego de la plaza de toros, dentro de sus cláusulas COVID, establece que si la reducción llega hasta el 30% del aforo, el adjudicatario vendrá obligado a la celebración de la Feria con una reducción de un 50% del canon establecido así como más reducciones en los gastos directos e indirectos previstos. En resumen, este cambio en un 75% real de aforo, que aún así conllevaría un 25% menos de localidades, se traduciría en un 25% menos de festejos y obligaciones del contrato así como de las prestaciones ofertadas. Para llevarse todo esto a cabo, una vez que se materialice el cambio normativo, la empresa deberá presentar un informe de justificación del equilibrio económico del contrato que deberá contar con el visto bueno del concejal de Asuntos Taurinos.