La Diócesis de Santander obtuvo 3,97 millones de euros de la campaña de la renta del año pasado gracias a que 109.019 contribuyentes marcaron en sus declaraciones la 'X' a favor de la iglesia, lo que representa al 36,3 por ciento del total, más de 5 puntos que la media nacional, que es del 31,2 por ciento.

Esto supone que en la campaña de la Renta de 2022, que hace referencia al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del 2021, ha habido un ascenso de 1.164 personas que han marcado la 'X' para destinar un 0,7% de sus impuestos a la Iglesia.

De esta forma, el dinero que recibió la Diócesis en la declaración de la renta de 2022 aumentó un 6,5 por ciento respecto a la de 2021, al obtener 3.977.746 euros, 243.384 euros más.

Datos que demuestran que la campaña "está creciendo en Cantabria", ha dicho el Obispo Manuel Sánchez Monge quien ha animado a marcar la casilla en favor de la Iglesia en la de este año, que se presentará a nivel nacional lo largo de la mañana, remarcando que lo recaudado se destina a fines sociales y recordando que "no te cobran más ni devuelven menos" y el reparto de lo recaudado es nacional.

90 CENTROS HAN ATENDIDO A 14.900 PERSONAS

Gracias a este "ejercicio de libertad" de marcar ola 'X' en la declaración de la renta, la Diócesis de Santander ha atendido a un total de 14.900 personas en los 90 centros que tiene repartidos por la región.

En concreto, parte de lo recaudado se repartió entre las 616 parroquias, 12 monasterios, 250 sacerdotes, un millar de catequistas, religiosos, monjes/as y misioneros.

También se destinó a 37 centros católicos concertados que imparten clases de religión a 18.000 alumnos o al mantenimiento de la cultura en los pueblos pequeños donde la iglesia es el edificio principal.

En cuanto a las actividades caritativas y asistenciales de los ocho grupos de centros que trabajan por las personas más necesitadas, dos centros que promueven el trabajo atendieron a 206 personas.

Asimismo, el centro que trabaja por la rehabilitación de los drogodependientes asistió a 2.825 personas y los 64 centros que tratan de paliar la pobreza a 4.941 personas, más las 6.000 personas que atendió Cáritas con 511 voluntarios.

Además, el centro de inmigrantes y refugiados asistió a 169 personas, así como los tres centros de acogida de menores y jóvenes; y los 13 centros de atención a enfermos, ancianos y personas con discapacidad ayudaron a 922.

Finalmente, los dos centros de la Diócesis para promoción a la mujer y víctimas de la violencia atendieron a 128 personas, y hubo cuatro centros destinados a la defensa de la vida y la familia.

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