Qué es el 'sharenting' y cómo puede perjudicar a nuestros hijos: claves para evitar problemas en internet
Una huella digital prematura de los más pequeños puede provocar problemas laborales y personales en el futuro

Entrevista a Claudia Caso, presidenta de la fundaciónSOL
Tenerife - Publicado el - Actualizado
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Las redes sociales son una herramienta ya casi imprescindible para socializar, pero también entrañan muchos riesgos. Los peligros aumentan cuando afectan a menores de edad. Y es que cada vez es más frecuente encontrar en Instagram, Facebook o TikTok fotos o vídeos de los hijos cuyos padres no son conscientes de las consecuencias que eso puede tener.
El problema del sharenting, como así se denomina a esta práctica, es más común de lo que se cree. El 89 % de los padres, casi nueve de cada diez, publica imágenes de sus hijos al menos una vez al mes. Son datos de una encuesta a nivel europeo que también arroja otras cifras interesantes. Por ejemplo, el 23 % de los niños tiene presencia en línea incluso antes de nacer porque sus padres publican imágenes de las ecografías durante el embarazo. Este porcentaje se dispara rápidamente, hasta el punto de que el 81 % está en internet antes de cumplir los seis meses. La cifra sigue aumentando en los primeros años de la infancia.
Todo este contenido es foto de atracción para pederastas. El 72 % del material incautado a pedófilos está compuesto por imágenes cotidianas no sexualizadas de menores, lo que pone de manifiesto el peligro de publicar estas fotos en nuestras redes sociales.
huella digital prematura
La Policía Nacional, en colaboración con la fundaciónSOL, una organización dedicada a construir un entorno digital seguro para las futuras generaciones, están desarrollando una campaña de concienciación sobre los riesgos del sharenting. "Lo más importante es aplicar el sentido común", sostiene Claudia Caso, presidenta de la fundaciónSOL: "Compartimos fotos del orgullo más grande que tenemos, que son nuestros hijos, es una práctica muy naturalizada que hacemos todos, pero porque lo hacemos desde la inconsciencia como un acto de amor".

Campaña de la Policía Nacional y la fundaciónSOL
El problema es que se crea "una huella digital prematura de nuestros hijos, a los que no se les consulta, que puede tener consecuencias para su futuro laboral o personal". Para Caso, "la mejor imagen es la que no se comparte", aunque es entendible el interés por inmortalizar su crecimiento y enviar fotos "a la abuela que está en la otra parte del mundo, pero incluso hasta por WhatsApp se pierde el control".
pistas para depredadores sexuales
La información que se comparte en redes puede ser muy útil para pedófilos, de ahí sus riesgos. "El uniforme del colegio o el lugar donde pasan las vacaciones les aporta muchas pistas", incide la presidenta de la fundaciónSOL, quien también recuerda que la inteligencia artificial facilita ahora que se pueden generar montajes de contenido sexual o pornográfico a partir de una simple fotografía inocente. "Inundamos la red con imágenes que pueden ser un caldo de cultivo para pedófilos", sentencia.