La vuelta paulatina a la normalidad debido a las bajas incidencias del coronavirus que genera una recuperación de las libertades perdidas así como la eliminación progresiva de las restricciones, trae consigo un despegue del tejido comercial en las zonas abiertas.

Es el caso de Triana, el presidente de los comerciantes, Carlos Bethencourt, asegura que tras meses de inactividad y tímida recuperación que se vio empañada por la quinta oleada, afrontan los meses de mayor consumo, con mucha ilusión, pero también con la certeza de que se ha tenido una época de rebaja más floja de la que esperaban.

Reconoce que el nivel de ventas se ha recuperado con el comienzo del curso y tras los buenos datos de contagios de covid en la isla, no deja de ser unos meses críticos porque muchos empleados no han logrado la financiación para prepararse para el tirón final.

No obstante, se espera que con la llegada de diferentes celebraciones que van aparejada con un incremento de consumo como es la noche de Halloween, organizarán diferentes actos para dinamizar la zona por parte de diferentes organizaciones.

Los últimos meses del año, es de grandes expectativas para el sector comercial, en cuando a las zonas abiertas en Las Palmas de Gran Canaria ponen el acento en la competencia que genera la apertura de los centros comerciales por la zona de influencia turística debido a la llegada de los cruceros, sin embargo, los comerciantes de Triana consideran que salvo que haya un nuevo contratiempo fruto de un incremento de las cifras de contagios debido a la llegada de una nueva oleada, el presidente de los comerciantes asegura que “se augura una temporada de ventas bastante buenas.”