El Padre Ángel, presidente de Mensajeros por la Paz regala 55 teléfonos móviles a los más desfavorecidos. "Los pobres necesitamos estar conectados", asegura el presidente de Mensajeros por la Paz, antes de entrar en la Iglesia de San Antón para entregar 55 terminales con acceso a internet a personas que no tienen recursos para que puedan estar conectadas con el mercado laboral y con sus familias. Dice el Padre Ángel que está feliz viendo cómo un mundo mejor es posible gracias a este tipo de iniciativas.

Es la tercera vez que la Asociación Mensajeros por la Paz promueve esta iniciativa, la misma que pretende extender a la iglesia que ha abierto hace dos días en Roma, y que sigue el modelo de la de San Antón, abierta las 24 horas del día para aquellas personas que necesitan cobijo y calor, y que ya cuentan con teléfonos móviles, así como "wifi" y electricidad. Los terminales entregados llevan una tarjeta con 3 gigabytes de datos y 150 minutos de llamadas, una donación de diversas empresas para que las personas más necesitadas puedan disfrutar "estas navidades consiguiendo un trabajo o para poder hablar con sus familias", según explica Luis Viced, comercial de una de las empresas.