El Sporting rozó la victoria entre el temporal, pero se tuvo que conformar con un empate contra el Albacete, colista en su visita a El Molinón. Los rojiblancos dominaron el partido adaptándose a las difíciles circunstancias de una noche invernal en Asturias. La falta de acierto y un buen Tomeu Nadal propiciaron el empate en Gijón.
Al Sporting le costó transitar hacia el área del Albacete en la primera parte. Los manchegos, bien pertrechados con una defensa de tres centrales, mostraron orden y solidaridad para combatir su situación de crisis. En los minutos iniciales de la segunda mitad se vio al mejor Sporting, rápido con el balón, rematador sin éxito.
Fueron los minutos anteriores a la inundación de El Molinón, castigado por las fuertes lluvias de una noche de jueves con temporal. Convertido el campo en una piscina, los rojiblancos cambiaron el discurso tras una fase de confusión. El fútbol se convirtió en más directo y ahí Djuka se topó de nuevo con la estirada del capitán del Albacete.
El punto sabe a poco por el esfuerzo realizado y, también, por el acelerón de los tres descendidos, que ganaron y pugnan por el ascenso a un ritmo que de momento nadie más puede seguir. El Sporting retará el domingo al Espanyol. Antes, el equipo necesitará recuperarse de un esfuerzo extra que solo sirvió para empatar. Los rojiblancos siguen quintos.