María Pilar, madre de una niña de 14 años con parálisis cerebral: "Mi hija no tiene bus escolar adaptado a su silla de ruedas"
Cada día llega una hora tarde al colegio al que va en Zaragoza porque el taxi que la recoge tiene que cubrir otra ruta antes

Martina llega cada día una hora tarde al colegio por problemas con el transporte adaptado. Te contamos su historia
Zaragoza - Publicado el
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¿Te imaginas llegar una hora tarde al colegio cada día? Es lo que le sucede a Martina, una niña de 14 años con parálisis cerebral y una discapacidad reconocida del 81%. Está escolarizada en un aula de Educación Especial en el colegio público San Braulio de Zaragoza, pero no llega puntual jamás.
No es culpa suya. Martina va en silla de ruedas y ninguna empresa de transporte escolar con plataforma quiere cubrir su ruta escolar. Así lo señalan a COPE fuentes del Departamento de Educación, de Aragón, que aseguran que han hecho "todo lo posible".
"Tenemos muchos problemas para cubrir determinadas rutas, se ha sacado la ruta sin precio pero nadie ha querido cubrirla", señalan. El año pasado, Educación tuvo que ponerle un taxi adaptado, pero este año las cosas han cambiado.
un taxi, ¿posible solución?
Ese mismo taxista tiene que cubrir otro recorrido antes de recogerla. Así que acude a por ella cerca de las 9:30 horas, lo que supone llegar al colegio cerca de las 10 horas. "Se pierde la asamblea y la primera hora lectiva todos los días", nos cuenta su madre, María Pilar Hernández.
Lo mismo sucede a la salida. Debería estar en el centro hasta las 16 horas, pero el taxi la recoge poco después de las 15 horas para poder llegar a la otra ruta que tiene asignada. "Se pierde actividades de huerto, algún taller...", lamenta.

Colegio Público San Braulio en el que estudia Martina
"Para mí es imposible conciliar", recuerda. Y es que su hermano, Oliver, acaba de empezar 1º de Infantil en otro centro, en Arcosur, el barrio en el que viven. Entre ambos colegios hay 17 km de distancia. "Me dijeron que por qué no llevaba al pequeño al mismo centro, pero yo quiero que pueda jugar con sus amigos en el parque, con sus vecinos; y además, el colegio de Martina no tiene trasporte escolar para él", señala María Pilar en COPE.
Solo quiero que mi hija haga las horas lectivas como los demás niños"
Madre de Martina
"Entran y salen a la misma hora, no puedo estar en dos sitios a la vez, no llego ni a uno ni a otro", explica.
en busca de una solución
Esta madre comunicó a finales del curso pasado su cambio de domicilio para que el colegio lo tuviera en cuenta de cara al transporte escolar. Entonces le dijeron que no habría problema. Una respuesta que se repitió el 1 de septiembre, cuando se puso en contacto de nuevo para recordar su situación.
No fue hasta pocos días antes de empezar el cole cuando el taxista les comunicó que, al cambiar de domicilio, la recogería más tarde, en una segunda vuelta, después de la primera ruta.

Martina, subiendo al taxi adaptado que la lleva al colegio
Tras varias llamadas infructuosas, decidió presentarse en el Servicio Provincial de Educación con sus dos hijos "para que vieran la situación".
"Esto no es solución, igual que se gastan el dinero en ampliar la ruta en otro colegio, podrían contratar otro taxi con otro auxiliar que recoja a mi hija a su hora, sólo estoy pidiendo que haga las horas lectivas como los demás, como cualquier niño", afirma María Pilar en COPE.
las consecuencias en la educación de martina
Llegar tarde tiene consecuencias añadidas. Si el colegio programa un especialista a primera hora, Martina no llega. Y, si nadie lo remedia, no podrá asistir al curso de natación que le ha sido concedido al colegio y por el que han pagado 94 euros. Una actividad programada por Zaragoza Deporte Municipal que comenzará el 14 de octubre y que durará prácticamente todo el curso, hasta finales de mayo. Se desarrolla en horario lectivo, de 10:00 horas a 10:45 horas.
Mi hija se da cuenta de que se pierde cosas por su discapacidad"
Madre de Martina
El autobús que lleva a los niños a la actividad saldrá a las 9:30 horas del colegio y tampoco tiene plataforma para su silla de ruedas. Aunque, si la tuviera, Martina tampoco podría subirse a él. Te recuerdo que llega al colegio cerca de las 10 horas. "Es imposible llegando a esa hora que esté a las 10 en la piscina con el neopreno puesto, aunque la recogiera otro taxi, no le da tiempo", lamenta María Pilar.
El colegio tiene prevista otra actividad deportiva los miércoles a las 9:30 horas. Y tampoco podrá hacerla.
"Mi hija es la única alumna de Educación Especial del colegio que no tiene autobús escolar y ella se da cuenta de que se pierde cosas", concluye. De momento, nadie le ha dado una solución. Desde Educación señalan que se va a seguir haciendo "todo lo posible".