Los objetivos de este programa son mejorar la empleabilidad de la población, el conocimiento de idiomas y la inclusión social de colectivos en situación de riesgo.

La diputada de Cultura, Maribel de Pablo, señala que “estas iniciativas redundan en una formación y actualización de conocimientos constante de la población altoaragonesa; algo que consideramos fundamental para seguir avanzando como sociedad de una forma cohesionada, especialmente en áreas rurales donde la pirámide poblacional suele estar invertida”.

Nueve comarcas altoaragonesas reciben aportaciones de la institución provincial de entre 25.000 y 32.000 euros cada una

Este programa de educación permanente contribuye a la consecución de objetivos como el fomento de la empleabilidad y la incorporación al mercado laboral, la prevención y mejora de la competencia digital mediante el manejo de la Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC’s); el aprendizaje permanente en la población altoaragonesa; la inclusión social de la población inmigrante; favorecer la participación comunitaria y promover la igualdad de oportunidades.

El grado de cumplimiento de estos objetivos, la preparación previa de los contenidos formativos; el nivel de participación; el coste de la actividad y las acciones encaminadas a potenciar la participación en el ámbito rural mediante ofertas complementarias a la de la red de centros públicos son algunos de los criterios para evaluar la concesión de las subvenciones a cada proyecto que concurra a las mismas. En total, nueve comarcas altoaragonesas reciben aportaciones de entre 25.000 y 32.000 euros cada una.

La aportación pública para el desarrollo de los correspondientes programas formativos no puede ser superior al 80% del coste total y deberá destinarse, en primer lugar, a la contratación de personal docente; en segundo lugar, para gastos de funcionamiento y, en tercer lugar. para otros gastos directamente relacionados con la realización de actividades de Educación Permanente.