Las lesiones más comunes de los costaleros y hombres de trono: "Pasos de 2.000 kilos a hombros y sobre el cuello"
Desde el Colegio Andaluz de Fisioterapeutas insisten en la importancia de calentar antes y después de una estación de penitencia

Costaleros de la Hermandad de la Sed reponen fuerzas
en un relevo
Sevilla - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Es la semana más esperada para muchos. Jornadas llenas de emoción. Lágrimas contenidas en una levantá donde crujen los maderos y los cuarenta hombres que van debajo. Los nervios a flor de piel de esa primera estación de penitencia. La sonrisa de ese niño cuando el nazareno le echa la cera en esa bola que cada vez se va haciendo más grande.
Son jornadas muy intensas. Y largas. Larguísimas. Estos días de Pasión, nazarenos, costaleros, nazarenos, músicos, cargadores y hombres de trono afrontan largas jornadas de pie y con mucho peso sobre ellos.
QUINCE HORAS EN LA CALLE
Hermandades como "El Cautivo de San Pablo", en la ciudad de Sevilla, está quince horas en la calle. Trece dura la estación de penitencia de la “Cofradía Nueva Esperanza de Málaga” o la cofradía de "Los Gitanos", de Granada.
Entonces, ¿Cómo debemos prepararnos para afrontar una estación de penitencia sin que nuestras articulaciones se resientan? Para responder a esta pregunta, en COPE Andalucía hemos hablado con Miguel Ángel Lérida, Presidente del Colegio Andaluz de Fisioterapeutas.
CÓMO PREVENIR LAS LESIONES
Según este fisioterapeuta, es importante calentar antes de empezar la estación de penitencia. "Esto nos ayudará a evitar lesiones posteriores". La recomendación en la que todos coinciden es caminar con frecuencia al menos un mes antes de salir en estación de penitencia.
Y durante la estación de penitencia, los peores momentos, los momentos en los que estamos más expuestos a lesiones son "cuando estamos parados" porque es la postura con la que más sufre nuestra espalda: “podemos estimular las rodillas poniéndonos disimuladamente de puntillas o hacer pausadas flexiones de rodilla”.
DOS TONELADAS BAJO LOS HOMBROS
Los costaleros, hombres de trono y cargadores, además, portan un enorme peso. De hecho, un paso puede pesar unos 2.000 kilos. De hecho, el palio de la Esperanza Macarena de Sevilla pesa unos 2.500 kilos, y hay algunos, como el de la Virgen de la Esperanza de Málaga, que supera los 5.000 kilos de peso. Hacen falta más de doscientos hombres para sacarlo.

El palio de la Macarena pesa más de dos toneladas
Ante estos elevados pesos, los costaleros y hombres de trono “deben ejercitar las articulaciones que se ven involucradas, como el cuello y hombros. Deben ajustarse bien el fajín, esa pieza larga y estrecha, que utiliza el costalero para reforzar la zona lumbar y sacro-lumbar de su cuerpo. Eso es clave para proteger la zona de las lumbares, ya que sufren mucho con la carga”.
A COSTAL
Y es que ser costalero, hombre de trono o cargador en Semana Santa requiere un duro esfuerzo. Por su parte, los costaleros cargan “a costal” los pasos durante la estación de penitencia. Según los expertos, recae todo su peso sobre su séptima vértebra cervical. Las lesiones más comunes son sobrecargas musculares, contracturas o lesiones discales (hernias).

Las sagradas imágenes de la hermandad del Cautivo, sobre las andas.
De hecho, sólo en 2024, más de doscientos costaleros de los pasos de las distintas hermandades de la ciudad de Sevilla recibieron asistencia de fisioterapia en el Centro de Atención al Costalero instalado en la sede del Colegio de Fisioterapias de Andalucía. A esta cifra hay que sumar más de mil atenciones de fisioterapeutas en Granada y unas doscientas en Cádiz.
Para evitar lesiones hay que calentar antes y después de la estación de penitencia
Presidente del Colegio Andaluz de Fisioterapeutas
Insisten los expertos: "Cada cuerpo es un mundo". Aunque siempre, para prevenir lesiones, hay que estirar y moverse mucho. No importa la edad o la condición física de cada uno. “Hacer ejercicios de calentamiento previo y después de la estación de penitencia, muchos estiramientos”.
También sufren lesiones los nazarenos y músicos que acompañan a las procesiones en estos días. Ellos también sufren “lumbalgias mecánicas y dolores en zona cervical. Estas lesiones vienen dadas por las posiciones mantenidas durante mucho tiempo”.
las sillas plegables, ¿la solución?
Además, en estos días, son miles las personas, cofrades, que esperan durante horas a que pase la procesión. Muchas de ellas llevan las famosas sillas plegables. ¿Con una silla nos olvidamos de lesiones o también sufre nuestro cuerpo por estar tanto tiempo de pie?
Miguel Ángel Lérida, nos cuenta también que los discos intervertebrales sufren mucho cuando estamos en la misma posición, aunque estemos sentados. Por eso, recomienda al público que sale a disfrutar de los pasos y está mucho tiempo esperando de pie, intente cambiar de postura, incluso estirar en el sitio.
Y tras una semana de muchas horas en la calle de pie, la recomendación es que nos vayamos al campo a pasear, a estirar las articulaciones. De esta forma, “se evitan muchas lesiones”.