Málaga recibió a casi 20.000 estudiantes de español el año pasado, unos 2.800 alumnos más que en 2017. Una actividad, la del turismo idiomático, que generó un impacto económico de 18 millones de euros en la ciudad malagueña. Por procedencia, los alemanes conforman el grupo más numeroso, seguidos de italianos y polacos, que eligen venir a Málaga para aprender el idioma.

La mayoría de los estudiantes tienen entre 15 y 24 años y su preferencia es alojarse con familias malagueñas. La duración media de los cursos de español es de dos semanas y el gasto de cada alumno por estancia es de casi 1.000 euros. También es destacable el aumento de los estudiantes de países más lejanos, como China, Corea del Sur o Canadá. José María Casero es el presidente de la Nueva Asociación de Centros de Español de Málaga, "Es un destino histórico. Más de 50 años apostando fuerte en nuestro sector. Es conocedor de nuestros estudiantes. Viene un estudiante aquí  y luego repite con la familia y tiene un alto porcentaje de repetición", agregó hoy.

En los dos últimos años, de la mano de la Nueva Asociación de Escuelas de Español para Extranjeros de Málaga (NACEM) y con la colaboración, entre otros, del Área de Turismo, se ha celebrado en la ciudad el evento Málaga Education Week, una semana en la que la capital malacitana se convierte en el epicentro del turismo idiomático a nivel internacional con este encuentro centrado en la industria del turismo idiomático con Málaga como destino. La segunda edición, que tuvo lugar el pasado enero, contó con jornadas de formación dirigidas a profesores, un congreso de español, viajes de familiarización, y el prestigioso workshop internacional ST Alphe Spain. Esta conferencia internacional destinada a profesionales del sector es uno de los once eventos que la empresa británica StudyTravel Ltd. organiza a nivel mundial. El de Málaga es el único de España y se ha celebrado de forma consecutiva en los últimos cinco años.