Toda ayuda es poca. La situación es extrema. Más de doscientos efectivos trabajan día y noche en la localización y rescate de Julen. Unas tareas en las que colaboran activamente voluntarios de protección civil, que se están encargando de hacerles llegar el avituallamiento necesario; comida y bebida que en su gran mayoría aportan de manera altruista vecinos, restaurantes y feligreses de las parroquias de Rincón de la Victoria y Toatalán, en cuyas instalaciones se han preparado gran cantidad de alimentos.
Protección Civil se encarga de distribuir ayuda al puesto de mando principal de primera intervención, que se encuentra cerca del pozo, a la familia de Julen, y al puesto de mando avanzado que se ha instalado en el domicilio de la familia Alcaide. Rafael Gálvez es director del 112 en Málaga y agradeció estos días la colaboración de todos, tanto en el pueblo como en alrededores, así como en el puesto de control. Desde Protección Civil agradecen toda la colaboración y esfuerzo desinteresado en el rescate del pequeño Julen.