El entrenador del Unicaja, Luis Casimiro, volvió a hablar y reconoce que, pese a que el equipo malagueño ya trabaja en grupos sobre la cancha en Los Guindos, "todavía no tiene nada que ver con situaciones reales de baloncesto", argumenta.

El técnico manchego, comentó que están "en fase de toma de contacto con el medio, con la cancha, los balones, el volver a sentirse jugador".

Casimiro relató que en esta semana de entrenamientos grupales, "están siendo diferentes, raros" por las medidas de seguridad sanitaria que se han impuesto, pero que "también vienen bien".

Recordó los dos meses de confinamiento, con los jugadores trabajando en sus domicilios, y dijo que, después de "estar tantos días en casa metidos", estar ahora "aquí te da más vida", destacó.

TENER PRECAUCIÓN

Casimiro, a pesar de los pasos que se dan en la preparación, fue precavido e insistió en que "la verdad es que, todo parecido con la realidad del juego, no tiene nada que ver", apunta.

"Estamos muy sensibilizados con lo que hay e intentamos mantener todas las normas al máximo, pero luego cuando estás en la cancha es difícil", afirmó Casimiro, quien añadió que cuando "empiezas a trabajar en grupos es difícil en ocasiones mantener este distanciamiento", dice.

QUIERE REANUDAR

Sobre la posibilidad de que se reanude la Liga Endesa en la fase por el título, con el formato de doce equipos divididos en dos grupos de seis que jugarían en una sede única, comentó que es una opción válida que "se puede llegar a lograr".

El Unicaja se ejercita en el pabellón de Los Guindos de Málaga con diecisiete jugadores, incluidos varios jóvenes de la cantera y a excepción de los lesionados de larga duración, el alero francés Axel Toupane y el escolta Jaime Fernández.