En la carrera hacia la sostenibilidad y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la transición hacia vehículos eléctricos se ha convertido en una prioridad global. España, como parte de esta tendencia mundial, se encuentra en una encrucijada: ¿Está preparada para adoptar masivamente el coche eléctrico?.

Uno de los principales obstáculos para la adquisición masiva de vehículos eléctricos en España es la infraestructura de carga. Aunque nuestro país ha experimentado un crecimiento en la cantidad de puntos de carga en los últimos años, todavía existe una brecha muy significativa en comparación con otros paisses europeos líderes en este aspecto, como Noruega o Países Bajos. Según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), a principios de 2023 España contaba con alrededor de 10.000 puntos de carga públicos, lejos de los más de 200.000 en Alemania o los más de 100.000 en Francia.

Este déficit en la infraestructura de carga plantea preocupaciones sobre la conveniencia y la autonomía de los vehículos eléctricos, especialmente para aquellos conductores que no tienen la opción de cargar en casa. A pesar de los esfuerzos del gobierno español y de algunos ayuntamientos por promover la instalación de más puntos de carga, queda mucho por hacer para alcanzar una red de carga suficiente y bien distribuida en todo el país. A esto hay que sumar el elevado coste de uno de estos vehículos y la autonomía.

Incentivos

A pesar de los desafíos en la infraestructura de carga, España ha implementado una serie de incentivos y políticas públicas para fomentar la compra de vehículos eléctricos. En 2022, por poner solo un ejemplo, el gobierno aprobó el Plan Moves III, dotado con más de 400 millones de euros, destinado a incentivar la compra de este tipo de vehículos, así como la instalación de puntos de carga y otras medidas de movilidad sostenible.

Además, se han establecido beneficios fiscales y exenciones, como la exención del Impuesto de Matriculación para vehículos eléctricos, así como bonificaciones en el Impuesto de Circulación en algunos municipios. Estas medidas buscan reducir el costo inicial de adquisición y hacer más atractiva la transición hacia la movilidad eléctrica.

Las ventas de vehículos eléctricos caen un 9% en marzo

Según un estudio publicado recientemente por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), las ventas de vehículos electrificados, que incluyen eléctricos e híbridos enchufables en categorías como turismos, cuadriciclos, vehículos comerciales e industriales, así como autobuses, experimentaron una disminución del 9,1% durante el mes de marzo, con un total de 10.633 unidades vendidas. Esta cifra representa una cuota de mercado del 9,5% del total del mes, lo que indica un ritmo mensual por debajo de lo necesario para alcanzar los objetivos anuales de reducción de emisiones. A lo largo del año, las ventas de vehículos electrificados constituyen el 10% del mercado, una cifra idéntica a la del año anterior, con apenas 29.263 unidades vendidas.

Durante el mes de marzo, las ventas de vehículos eléctricos puros experimentaron una disminución del 12,4%, con un total de 4.982 unidades matriculadas. Esto representa el 4,45% de la cuota de mercado del mes. En el transcurso del año, las ventas de estos vehículos suman 13.420 unidades, lo que supone un descenso del 3,3% en comparación con el mismo período del año anterior. La cuota acumulada durante el año es del 4,58%.

Ventas de vehículo eléctrico en Jaén

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La tendencia a elegir este tipo de vehiculos sigue creciendo sin prisa pero sin pausa. Esta tendencia está siendo impulsada por iniciativas de empresas como Endesa y VIALTERRA, que están electrificando la flota de vehículos de sus empleados con automóviles eléctricos.

Sin embargo, aún no se han registrado otras iniciativas locales de movilidad eléctrica compartida y las cifras totales de vehículos eléctricos en la provincia siguen siendo inferiores a las de otras provincias.

Si de dispositivos de recarga hablamos, en la provincia de Jaén, estos puntos no solo se encuentran en gasolineras, sino también en otros lugares como hoteles, restaurantes, concesionarios, centros comerciales, estacionamientos, tiendas y residencias particulares, entre otros. Sgeún datos que maneja en su base de datos la empresa Electromaps, Jaén cuenta con un total de 126 puntos de recarga distribuidos por distintos municipios.

Pros y contras de los vehículos eléctricos

• Pros

Sostenibilidad ambiental: Los vehículos eléctricos no emiten gases contaminantes ni contribuyen al cambio climático, lo que ayuda a mejorar la calidad del aire en ciudades como Jaén y reduce la huella de carbono.

Reducción de dependencia de combustibles fósiles: Al depender de la electricidad, los vehículos eléctricos pueden ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles, cuya extracción y consumo tienen impactos ambientales negativos.

Menor costo de mantenimiento: Los vehículos eléctricos tienden a tener menos piezas móviles y requieren menos mantenimiento que los vehículos de combustión interna, lo que puede suponer un ahorro a largo plazo para los propietarios.

Incentivos y beneficios fiscales: En muchas regiones, incluyendo Jaén, los propietarios de vehículos eléctricos pueden beneficiarse de incentivos fiscales, como exenciones de impuestos y tarifas de peaje reducidas, lo que hace que la propiedad y operación de estos vehículos sean más atractivas.

Silencio y confort de conducción: Los vehículos eléctricos son conocidos por su funcionamiento silencioso y suavidad de conducción, lo que puede mejorar la experiencia del conductor y los pasajeros.

• Contras

Infraestructura de carga limitada: Aunque está en crecimiento, la infraestructura de carga para vehículos eléctricos en Jaén y otras partes de España todavía es bastante limitada, lo que puede generar preocupaciones sobre la autonomía y la conveniencia de la carga.

Precio inicial más alto: A menudo, los vehículos eléctricos tienen un precio inicial más alto en comparación con los vehículos de combustión interna, lo que puede ser una barrera para algunos compradores.

Autonomía limitada en algunos modelos: Aunque la autonomía de los vehículos eléctricos ha mejorado significativamente en los últimos años, algunos modelos más económicos pueden tener una autonomía limitada, lo que puede ser un problema para aquellos que necesitan viajar largas distancias regularmente.

Tiempo de carga más largo: Aunque la carga rápida está disponible en muchos lugares, los tiempos de carga de los vehículos eléctricos aún pueden ser más largos que el tiempo necesario para llenar un tanque de combustible en un vehículo de combustión interna, lo que puede ser inconveniente para algunos conductores.

Impacto ambiental de la producción de baterías: Si bien los vehículos eléctricos no emiten gases contaminantes durante su funcionamiento, la producción de baterías de litio puede tener un impacto ambiental significativo debido a la extracción de minerales y los procesos de fabricación.