Condenado a prisión por morder el dedo a un notario en Huelva

La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un hombre a seis meses de prisión por un delito de atentado que agredió a un notario que se negó a darle la documentación que le pedía, por el que fue absuelto en primera instancia, al entender que este actuaba como funcionario público.

La sentencia admite el recurso presentado por la Fiscalía y el propio notario contra la emitida por el Juzgado de lo Penal 4 que lo consideró responsable de un delito leve de lesiones a dos meses de multa a razón de seis euros al día y le imponía una orden de alejamiento por un período de seis meses, si bien lo absolvía del delito de atentado del que venía siendo acusado; y la revoca para condenarlo por este último.

Se considera probado que el acusado acudió a la notaría para reclamar unos documentos familiares que venía solicitando desde fecha indeterminada en diversas ocasiones vía telefónica a esa misma notaría; una vez dentro fue invitado por el personal de dicha notaría para que accediera al despacho del notario, quedando ambos en su interior con la puerta cerrada.

Ante la negativa del notario de entregar los documentos, comenzó entre ambos una discusión, donde el acusado, tras utilizar un tono elevado de voz, se abalanzó sobre el primero, hasta el punto de lanzarle una carpeta y arrinconarle contra una pared, comenzando un intento de agresión física que fue repelido por el notario con un empujón.

Posteriormente, el acusado, tras caer al suelo y golpearse en la zona del ojo con una mesa del despacho, se incorporó y mordió en un dedo al notario; en ese momento, una empleada de la notaría ayudada con un cliente intervino para parar los hechos dando aviso a la Guardia Civil.

La sentencia apelada absolvió al acusado del delito de atentado al considerar que en este caso el notario no actuaba como funcionario público al entender que sólo estaba asesorando, algo en lo que la Audiencia de Huelva entiende que "yerra" ya que, aún siendo así, esta también sería una función que le corresponde como profesional del derecho.

Pero es más, añade la Audiencia, incluso siguiendo la interpretación que hace el magistrado del Reglamento Notarial para absolver al acusado del delito de atentado, en el momento de los hechos el notario estaría actuando como funcionario.

Así se desprende de lo recogido en los hechos probados y de la declaración del acusado en el juicio al manifestar que "fue a pedirle al notario una escritura y el testamento de su padre, produciéndose la agresión ante la negativa del este de proceder a su entrega, de lo que se concluye que en ese momento la labor del notario no era simplemente la de asesorar como se indica en la sentencia apelada".