El secreto en tus ventanas para ahorrar en facturas y ganar en confort
Con la llegada del frío, saber identificar las señales de alerta y elegir cerramientos eficientes se convierte en una inversión clave para el bienestar en el hogar
Córdoba - Publicado el - Actualizado
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El frío se intensifica y, con él, la atención se vuelve hacia el confort del hogar, un bienestar que a menudo se ve comprometido por un elemento clave: las ventanas. Cuando las corrientes de aire se cuelan en casa, aparece la humedad y la factura energética aumenta sin control, es probable que haya llegado el momento de renovar los cerramientos. Contar con ventanas eficientes no solo mejora el aislamiento térmico, sino que repercute directamente en la calidad de vida diaria.
Pero, ¿cuáles son las señales inequívocas de que unas ventanas han llegado al final de su vida útil? Según Miguel Ángel Cerro, director de marketing de la empresa especializada Cesvent, en la mayoría de los casos, los indicios "se puede observar a simple vista, como en cualquier otro producto". El deterioro evidente o el envejecimiento de los materiales es un primer aviso de que las ventanas ya no cumplen su función. Sin embargo, el indicio más claro es el que se puede oír.
Las señales que no puedes ignorar
El experto afirma que la señal definitiva llega "cuando ya las ventanas nos hablan, dicho coloquialmente". Este fenómeno se manifiesta en el característico sonido que delata una mala estanqueidad. "Nos acercamos y escuchamos ese típico silbido que se produce de un cerramiento que no está debidamente estanco y permeable al aire, pues esta es una señal inequívoca de que las ventanas están dejando nuestro hogar expuesto a las inclemencias del tiempo", detalla Cerro.
Ventanas
Escuchamos ese típico silbido que se produce de un cerramiento que no está debidamente estanco"
Director de Marketing de Ventanas Cesvent
Esta permeabilidad al aire no solo afecta a la comodidad, sino que tiene una consecuencia directa en el bolsillo. Unas ventanas que no cierran herméticamente provocan una pérdida constante de temperatura, obligando a los sistemas de calefacción y refrigeración a trabajar más para mantener un ambiente estable. Esto, garantiza el experto, "va a suponer pagar mucho más en la factura energética de lo que deberíamos en condiciones normales".
Más allá del ahorro: una inversión en calidad de vida
La influencia de unas ventanas eficientes va mucho más allá del simple ahorro energético. Su principal aportación es la estabilidad de la temperatura interior, lo que se traduce en un hogar mucho más confortable durante todo el año. Al evitar las pérdidas de calor en invierno y de frío en verano, se reduce drásticamente la energía necesaria para climatizar la vivienda, aliviando la factura mensual.
Cerramientos en una vivienda en construcción
Además de este beneficio principal, la renovación de los cerramientos aporta otras ventajas significativas. Según Miguel Ángel Cerro, el cambio "hace que se revalorice tu hogar" y, al mismo tiempo, "permite cumplir con las exigencias actuales para el alquiler de la vivienda". A esto se suma la mejora en la seguridad y, no menos importante, un mayor aislamiento acústico frente al ruido exterior, un factor fundamental para el descanso y la tranquilidad.
El error de posponer el cambio
Uno de los mayores obstáculos a la hora de afrontar una renovación de este tipo es la tendencia a retrasar la decisión, a menudo por considerarla un gasto elevado. Sin embargo, Cerro advierte sobre esta percepción: "Aquí está el problema, en verlo como un gasto". La realidad es que, cuanto más se pospone la sustitución, más dinero se pierde. "Mientras más tiempo tardamos en dar el paso, más dinero escapará por nuestras viejas ventanas", sentencia de manera gráfica.
Mientras más tiempo tardamos en dar el paso, más dinero escapara por nuestras viejas ventanas"
Director de Marketing de Ventanas Cesvent
Por tanto, el principal error es el propio retraso. Los expertos animan a no verlo "como un gasto, sino como una oportunidad de mejorar nuestra vivienda y comenzar a ahorrar en energía". Desde esta perspectiva, la renovación de ventanas se convierte en una inversión que empieza a recuperarse desde el primer día a través del ahorro en las facturas, mejorando simultáneamente el confort y el valor del inmueble.
Aunque los programas de ayudas públicas para la renovación de ventanas a nivel autonómico o municipal han estado disponibles en el pasado, actualmente no hay ninguno activo para particulares. No obstante, empresas del sector como Cesvent ofrecen alternativas para facilitar la inversión. "Disponemos actualmente de un programa de financiación a la medida de las necesidades de nuestros clientes", explica Cerro, quien menciona la posibilidad de financiar el cambio con "cómodas cuotas desde 100 euros al mes", previa aprobación de la entidad financiera.
El asesoramiento técnico resulta fundamental en este proceso, ya que no todos los hogares tienen las mismas necesidades. Factores como la ubicación de la vivienda —no es lo mismo un centro urbano ruidoso que una zona rural con cambios bruscos de temperatura—, la orientación o la preocupación por la seguridad determinan la solución óptima. Un equipo de expertos puede recomendar el tipo de ventana, el sistema de apertura más útil para cada estancia y otros elementos adicionales que mejoran la calidad final de la instalación, garantizando una solución duradera y adaptada a cada caso particular.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.