Desmantelada una fábrica ilegal de tabaco en Lucena y detenidas tres personas por contrabando
La operación ha permitido intervenir más de 2.600 kilos de picadura de tabaco, así como cientos de cajetillas de cigarrillos listas para su distribución

Guardia Civil
Córdoba - Publicado el
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La Guardia Civil ha desmantelado en Lucena (Córdoba) una fábrica ilegal de tabaco y ha detenido a tres personas como presuntas autoras de un delito de contrabando. La operación, desarrollada por agentes de la Compañía de Lucena, ha permitido intervenir más de 2.600 kilos de picadura de tabaco, así como cientos de cajetillas de cigarrillos listas para su distribución.
Las investigaciones comenzaron a mediados de febrero, cuando la Guardia Civil recibió varias informaciones que apuntaban a la posible existencia de una nave industrial en la que se procesaba tabaco de forma clandestina. Según las fuentes, la nave se encontraba en un polígono de la localidad y podría estar siendo utilizada como centro de producción de picadura de tabaco, un producto muy demandado en el mercado negro.
Ante estas sospechas, se puso en marcha un dispositivo de vigilancia discreta en la zona. Los agentes lograron ubicar la nave y observar movimientos compatibles con una actividad industrial no declarada. También se identificó a las personas que accedían al lugar con regularidad, lo que permitió avanzar en la investigación y solicitar las autorizaciones judiciales necesarias para proceder a los registros.
Durante el operativo, la Guardia Civil descubrió que los sospechosos no solo trabajaban en la nave industrial, sino que también utilizaban dos garajes ubicados en el casco urbano de Lucena. En ellos, almacenaban grandes cantidades de tabaco ya procesado y cajetillas preparadas para la venta, lo que evidenciaba una estructura organizada de producción y distribución de tabaco ilegal.
El registro de la nave confirmó las sospechas: en su interior había una auténtica fábrica clandestina, equipada con maquinaria para el tratamiento de la hoja de tabaco, su picado, secado y empaquetado. Los agentes intervinieron 2.100 kilogramos de picadura de tabaco, además de 50 cajetillas de tubos de cigarrillos. Asimismo, en los garajes se localizaron otros 545 kilos de tabaco picado y 330 cajetillas de diversas marcas, muchas de ellas sin los precintos fiscales obligatorios.
Todo el material fue incautado y los tres presuntos implicados fueron detenidos y puestos a disposición de la autoridad judicial competente. Las diligencias instruidas indican que se trata de un caso de contrabando, ya que ni la fábrica ni la comercialización del tabaco contaban con autorización legal ni control sanitario.
Desde la Guardia Civil se ha recordado que el contrabando de tabaco no solo causa un importante perjuicio económico a las arcas públicas por el impago de impuestos, sino que también representa un riesgo para la salud de los consumidores. El tabaco ilegal no está sujeto a controles de calidad ni sanitarios, y en muchos casos contiene sustancias aún más perjudiciales que el tabaco legal.
La operación continúa abierta y no se descarta que haya nuevas detenciones en los próximos días, ya que la investigación apunta a que los detenidos podrían formar parte de una red más amplia dedicada al contrabando de tabaco a nivel provincial o incluso regional.