El ciclista esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma), líder de la Vuelta a España, ha reconocido que la decimosexta etapa, disputada entre Pravia y el Alto de La Cubilla sobre 144,4 kilómetros, ha supuesto un día "bastante duro", y ha asegurado que "no" tiene miedo a las últimas jornadas y a que sus rivales traten de arrebatarle el maillot rojo.

"No tengo miedo de estas últimas etapas: en el Tour de Francia del año pasado me sentí muy bien en la tercera semana. Estoy muy feliz de mi actuación en La Vuelta 19. Estoy disfrutando de cómo va la carrera para mí y para Jumbo-Visma. Ahora quiero disfrutar el día de descanso y seguir concentrado hasta Madrid. ¿Que si somos el nuevo Team Sky? Ojalá podamos serlo y ganar tantas vueltas como ellos", señaló en declaraciones recogidas por la organización.

Por otra parte, Roglic reconoció que este lunes fue "un día bastante duro". "Hubo una subida final muy larga y fue un buen día para nosotros, después de todo. (Miguel Ángel) López atacó fortísimo. Yo estaba pendiente de Valverde y decidí no saltar a por él en principio. Cuando me di cuenta de que Valverde estaba pasando un mal momento, arranqué para empalmar con el grupo de delante", finalizó.