A la hora de adquirir una vivienda o inmueble, normalmente solo pensamos en el precio de la vivienda o en su defecto en la hipoteca que le vamos a solicitar al banco. Evidentemente, esta cifra supone la mayor parte del dinero a desembolsar, pero no es en absoluto el único gasto que tendremos que afrontar cuando nos hacemos con un nuevo inmueble en propiedad.

La notaría, la tasación del inmueble, el registro y los impuestos son variantes que tenemos que tener muy en cuenta a la hora de elaborar nuestro presupuesto ya que una parte importante de la inversión se va en estas operaciones adjuntas e indispensables para efectuar la transacción con garantías. La suma de todos ellos puede llegar a suponer el 15% del gasto total, por lo que no se deben desdeñar ni olvidar de antemano.

Costes adicionales a la compra de una vivienda

Notaría

Los costes del notario son sencillos de calcular ya que los aranceles están regulados por el Estado y todos los notarios perciben la misma suma de dinero por el mismo servicio. Para otorgar la escritura pública de compraventa el coste varía entre los 600 y 1000 euros, en función del precio que tenga el inmueble en cuestión.

Registro de la propiedad

Una vez el notario firma las escrituras, llega la hora de llevarlas al registro. Una vez más, los costes de esta operación están fijados por las normas y suelen oscilar, en función del coste de la vivienda, entre los 400 y 650 euros.

Impuestos por compraventa

La cantidad de impuestos que debemos pagar por la compra de una vivienda depende fundamentalmente de dos factores: el precio de la vivienda en cuestión y si es nueva o de segunda mano.

A la hora de comprar una vivienda nueva, el impuesto más elevado al que nos vamos a enfrentar es el IVA, que asciende al 10% en todas las comunidades autónomas con excepción de las Islas Canarias, donde no hay IVA, sino IGIC, en este caso del 6,5%.

En el caso de que estemos comprando una vivienda pública, el IVA se sitúa en torno al 4%, aunque hay que analizar cada comunidad autónoma y cada tipo de vivienda social.

Además hay que sumar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, que varía dependiendo de la comunidad autónoma.

En las viviendas usadas, el impuesto más importante que tenemos que afrontar es el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP). Por regla general, y dependiendo de diferentes variables, oscila entre el 6% y el 10%. Para determinados colectivos, como familias numerosas y jóvenes, y dependiendo también de la comunidad autónoma, puede haber tipos reducidos. Las comunidades con el ITP general más reducido son País Vasco, Navarra y Madrid, las que lo tienen más elevado son Cataluña, Cantabria, Galicia y Comunidad Valenciana.

Costes adicionales a la hipoteca

Si para efectuar la compra de una vivienda solicitamos una hipoteca, como sucede con la mayoría de transacciones inmobiliarias, habrá que sumar unos costes adicionales a los derivados de la compra.

Tasación del inmueble

Cuando solicitamos una hipoteca, debemos pagar a una tasadora para que ponga en valor la vivienda que queremos adquirir y el banco pueda estimar que porcentaje del precio total está dispuesto a prestarnos. El coste de tasar la vivienda suele estar entre 250 y 600 euros.

El resto de gastos adicionales que antes repercutían en el comprador los asume el banco desde la aprobación de la nueva Ley Hipotecaria en 2019. Entre estos gastos están el IAJD, la Notaría y el Registro de la Propiedad.