La Comisión Europea ha puesto en marcha el proyecto 'Wi-Fi 4 EU" (Wi-Fi para la Unión Europea, en español). Se trata de destinar 120 millones de euros para que todas las entidades públicas del continente tengan acceso a Internet. Esto se suma al impulso que quiere dar el Gobierno español para que la red de redes llegue a todos los rincones del país.

Aprobado ya en el Consejo de Ministros, se destinarán 525 millones de euros. Se completará el despliegue de fibra óptica en todos los puntos de España, especialmente en las pequeñas poblaciones y zonas rurales. Según ha declarado el secretario de Estado de la Sociedad de la Información y Agenda Digital a COPE, José María Lasalle, la "brecha de acceso a la fibra  ocasionada por las dificultades geográficas y por la despoblación que padecen áreas importantes del país que va a ser suplida mediante este plan, consiguiendo que en el año 2021 el 95% de la población y el 100% de los municipios tengan acceso a fibra".

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De esta manera, advierte Lasalle, se podrán introducir en estas zonas "elementos de gestión digital en explotaciones agrarias y ganaderas y acceso a todos los contenidos audiovisuales que se consumen en las ciudades".

Actualmente España ya dispone de la red de fibra óptica más extensa de Europa, con más de 33 millones de accesos.

Pueblos sin acceso a Internet

Mientras se pone en marcha este plan, aún hay zonas de España que no tienen de acceso a Internet. Una de ellas es El Peralejo, en Sevilla. Enrique es vecino de esta pedanía de El Castillo de las Guardas y explica que allí "en el siglo XXI, no podemos disfrutar de las nuevas tecnologías que existen ahora mismo a nivel mundial". Ello implica que los negocios "no prosperen", especialmente "el turismo rural".

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"Tener acceso a los clientes a través de Internet aquí es complicado, por la ausencia de cobertura. Pero no solo del acceso a la red, sino de la cobertura normal de teléfono móvil", indica este vecino, que señala en COPE que "es una herramienta de desarrollo económico muy importante, y desde luego en la zona rural en la que nosotros vivimos debería ser más importante todavía, deberían poner más hincapié en esto".

Enrique ha lamentado que "estamos acostumbrados en las aldeas a tener servicios escasos, y que lleguen tarde y mal". "El acceso a Internet es muy limitado, para ver cuatro correos, si llegan... Incluso con la Televisión Digital Terrestre, si existen inclemencias en el tiempo, de los treinta o cuarenta canales a lo mejor nos llegan tres", se queja. "Vivimos en el siglo XXI igual que si estuviéramos a principios del XIX