La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Ana Dávila, ha garantizado que los menores atendidos en el Centro de Primera Acogida de Hortaleza en la capital contarán con espacio "suficiente" y ha insistido en la "tensión" que sufren los recursos de la Administración autonómica por culpa de la gestión migratoria del Gobierno de España.

"El espacio está totalmente garantizado", ha señalado Dávila en relación con la información publicada este fin de semana por el diario 'El País' en la que se afirma que el Ejecutivo regional permitió a la gestora del centro incumplir el mínimo legal de 5,5 metros cuadrados de espacio para cada menor, a fin de aumentar las plazas de acogida de 52 a 72.

La consejera ha subrayado que desde octubre del pasado año la Comunidad está requiriendo información al Gobierno sobre el traslado de menores a la Comunidad de Madrid para "poder adaptar los recursos", los cuales "están tensionados", sin que la Administración autonómica haya recibido del Ejecutivo central "ningún tipo de información".

"No obstante, estamos ampliando las plazas de los recursos que tenemos a disposición y creando también nuevas plazas para poder atender esta crisis migratoria, pero es verdad que seguimos necesitando esa información por parte del Gobierno para poder atender adecuadamente a todos los menores, que evidentemente así va a ser, y esa es la garantía que nosotros ofrecemos, que están bien atendidos", ha sentenciado Ana Dávila.

Ya el pasado mes de enero, el Gobierno de la Comunidad habilitó 16 nuevas plazas en el centro de Primera Acogida Casa de Campo para trasladar a menores del Centro de Hortaleza hasta que concluyan las obras de acondicionamiento de la primera planta, afectada por el incendio que tuvo lugar el 1 de enero.

El incendio, provocado por la quema intencionada de colchones, obligó a la Comunidad de Madrid a reubicar en otros emplazamientos, en un primer momento, a 32 de los 68 ocupantes de Hortaleza. Sindicatos llevan tiempo quejándose de los problemas de espacio del centro e incluso criticaron que algunos menores tuviesen que dormir en colchones en el suelo.