Este fin de semana se cumplen cinco años de la muerte de David Bowie, uno de los iconos más representativos del género pop. Su pérdida se hizo sonar tanto dentro del sector como fuera, ya que Bowie era una de las más representativas del siglo XX.

No en vano, David Bowie es una de las personas más que ha dejado uno de los artes del mundo. Al igual que Bowie, otros tantos músicos han dejado huella en la historia, entre los que se encuentra Paul McCartney. Ambos compartieron el mismo momento en la historia, y su coincidencia precisamente les hizo compartir momentos que han pasado a la historia. Aunque nunca se dejaron ver juntos encima de un escenario, la relación de amistad que mantenían ha dejado diversas curiosidades.

El cuadro de McCartney

Una de ellas tuvo mucho que ver con una de las aficiones de McCartney. Este disfrutaba cogiendo sus pinceles y dejando volar su imaginación o, como él mismo lo diría, "solo para dejar que la pintura le abriera el camino", pintaba todo lo que se le ponía por delante.

Esas pinturas no se creaban con un sujeto físico, sino que se partían del ojo de la mente de Macca. Como tal, 'Bowie Spewing' ve la imagen de Ziggy Stardust, (quizás en relación con la Polaroid de Bowie de Linda McCartney) vomitando a través del lienzo como uno de los momentos más expresivos que un ser humano puede conocer.

Un retrato que parecía hacer referencia al cantante. Un hecho del que el propio Bowie se dio cuenta. Esto provocó que McCartney le preguntase directamente al propio Bowie si le había molestado la obra. “Por supuesto que no, pero qué coincidencia, actualmente estoy trabajando en una canción. eso se llama 'McCartney Shits' ", le contestó, en lo que se convirtió una de las entrevistas más insólitas entre ambos amigos de profesión.