Boticaria García, sobre tirar la comida tras el apagón si hiciste esto con tu nevera: "Evitas la diarrea"

La nutricionista hace esta recomendación tras la gran caída del sistema eléctrico en España que ha dejado muchos electrodomésticos sin funcionar

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Mujer en el refrigerador abierto en la cocina de casa

José Manuel Nieto

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La gran caída del sistema eléctrico en España, que ha dejado sin suministro a millones de hogares durante horas, ha disparado las dudas sobre la seguridad alimentaria. ¿Qué hacer con los alimentos que han estado horas en una nevera apagada? La reconocida farmacéutica y divulgadora sanitaria Boticaria García ha querido dar respuesta urgente a esta preocupación en redes sociales: en algunos casos, tirar la comida puede evitar una diarrea y males mayores.

A través de una publicación en Instagram, Boticaria ha explicado que, de acuerdo con las recomendaciones de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA), si un apagón ha durado más de cuatro horas —como ha sido la tónica en este reciente episodio en España—, los alimentos frescos almacenados en la nevera, como carnes, pescados o sobras, deberían desecharse sin contemplaciones. La experta subraya que, aunque muchos ciudadanos se resistan a vaciar su frigorífico, el riesgo para la salud es real. "Espero que con este recordatorio evitemos alguna diarrea", concluye en su mensaje, que puedes consultar aquí.

El congelador, un aliado  

La situación con el congelador es algo más alentadora. Según detalla Boticaria García, los alimentos congelados pueden conservarse en buenas condiciones durante hasta 48 horas si el congelador estaba lleno y no se ha abierto durante el apagón. Si estaba medio lleno, ese margen se reduce a unas 24 horas. Esta información coincide con lo publicado por la propia FDA en su guía sobre emergencias alimentarias.

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Puerta abierta del frigorífico de casa con productos lácteos por la noche

Sin embargo, los comentarios de los usuarios muestran un amplio abanico de reacciones. Algunos aseguran que, tras siete horas sin luz, sus alimentos seguían congelados como "un iceberg", mientras otros se niegan a tirar la comida apelando al olfato y al sentido común. "Si no huele mal ni sabe raro, pa’ dentro", comentaba un seguidor, en una muestra del escepticismo que muchos mantienen pese a las advertencias sanitarias.

En este sentido, la nutricionista recuerda que el deterioro de los alimentos no siempre es detectable por el olor o el aspecto, ya que las bacterias patógenas, responsables de infecciones gastrointestinales, no alteran el sabor ni el color. De ahí la importancia de actuar con prudencia, especialmente con productos de alto riesgo como la carne, el pescado o los platos cocinados.

Consejos para futuras emergencias  

Tras este apagón histórico, la divulgadora anima a tomar medidas preventivas pensando en futuras incidencias. Mantener el congelador siempre lo más lleno posible, evitar abrir la puerta del frigorífico durante una interrupción de la electricidad y contar con un termómetro de nevera pueden ser claves para valorar mejor el estado de los alimentos en situaciones de emergencia.

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Mirando en un refrigerador vacío o un refrigerador con la puerta abierta

Además, recuerda que si tienes dudas sobre algún alimento tras una descongelación parcial, lo más seguro es desecharlo. La máxima de seguridad alimentaria, como indica también la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), es clara: ante la duda, tirar.

La caída del sistema eléctrico ha supuesto un reto logístico y económico para muchos hogares, especialmente en un contexto de encarecimiento generalizado de la cesta de la compra. Pero como advierte Boticaria García, a veces lo más doloroso para el bolsillo es también lo más prudente para la salud. Mejor una nevera vacía que una visita a urgencias.