Restauración consolida la autoría de Caravaggio del "San Juan en el desierto"

La Catedral de Toledo ha presentado este jueves la restauración que, durante año y medio, ha llevado a cabo de la pintura de Caravaggio "San Juan en el desierto", la cual, según el conservador restaurador del templo primado, Antonio Sánchez Barriga, ha "consolidado" la autoría del autor italiano de este cuadro, antes atribuido, entre otros, al pintor español Juan Bautista Maíno o al italiano Bartolomeo Cavarozzi.

Además de Sánchez Barriga, han asistido al acto de presentación del cuadro restaurado el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, y el deán de la Catedral, Juan Pedro Sánchez Gamero, quienes han felicitado al conservador de la Catedral por este importante trabajo de restauración de una de las obras "emblemáticas" de la Catedral, que devuelve el cuadro a su aspecto original y que disipa las dudas sobre su autoría.

Sánchez Barriga ha explicado que el estudio que ha realizado un equipo multidisciplinar de historiadores, archiveros, especialistas en fotografía infrarroja y ultravioleta y técnicos en físico-química especializados en material artístico no destructivo "consolida" la atribución de este cuadro al pintor italiano.

"Este cuadro no es una copia, no existe un cuadro como éste en ninguna otra parte del mundo, y los hallazgos que han aportado los resultados radiográficos y químicos del estudio evidencian elementos que son inequívocos de la técnica pictórica de Caravaggio, efectuada 'a la prima'", ha asegurado el restaurador, que ha puesto como ejemplo "el dibujo directo sobre una preparación terrosa" y también las pequeñas incisiones en zonas que bordean la figura, hechas cuando la preparación está aún fresca.

Otra de las novedades que aporta la radiografía son los "decisivos cambios" que el artista realiza desde la primera idea hasta el acabado definitivo, ha observado Sánchez Barriga, que ha explicado que la primera es una imagen del santo con el dedo índice apuntando a Cristo, mientras que después pinta una mano que agarra una caña con la cruz y pinta el cordero místico sobre el manto del martirio, que en algunas restauraciones se elimina y en esta última vuelve a aparecer.

En este punto, el restaurador ha destacado que el lienzo de "San Juan en el desierto" fue tratado con "restauraciones indebidas, añadidos, barnizados y repintes" en el intento de mejorar la pintura, pero estas intervenciones tergiversaron la verdadera imagen de este maravilloso cuadro, que se exhibe en la Capilla del Sagrado Corazón de la Catedral Primada desde 1785, fruto de la donación realizada por el canónigo José Antonio Zoilo Sáenz de Santa María.

Como ejemplo de algunas "desafortunadas" restauraciones -en total se han realizado cuatro anteriores a ésta en 1787, 1960, 1965 y 1990-, Sánchez Barriga ha destacado la ocultación del fresco sonrosado de la cara de San Juan Bautista y "la sonrisa complaciente de sus labios", a lo que ha sumado la destrucción de una flor que el Bautista llevaba en la cabeza -"muy representativa también de la pintura de Caravaggio", ha enfatizado-, cuyos restos pueden verse ahora al descubierto.

Éstos son algunos de los motivos que llevaron al Cabildo Primado a constatar la necesidad de su restauración y a encargar al equipo técnico conservador de la Catedral la realización de un estudio que aportara nuevos datos que contribuyeran también a disipar las dudas sobre la autoría del cuadro, ha explicado el deán de la Catedral.