Málaga es la segunda provincia andaluza en la que más ha caído el precio de la vivienda vacacional desde que alcanzó su máximo histórico, allá por finales del año 2007. Desde entonces, este tipo de inmueble –que compran españoles y extranjeros para pasar sus vacaciones en la Costa del Sol- se han abaratado un 46 por ciento. Hoy el precio medio se sitúa en los 1.400 euros por metro cuadrado; las casas más caras están en Marbella y las más baratas, en Manilva. Casares es, por cierto, la localidad andaluza en la que más han bajado los precios de los inmuebles vacacionales, con una caída de casi el 56 por ciento. Los datos son de la empresa especializada en el sector inmobiliario Tinsa. Lo que más se demanda en Málaga son pisos unifamiliares; en el caso de los compradores españoles, predominan los andaluces y madrileños. En cuanto a la demanda extranjera, encontramos sobre todo británicos, pero también alemanes, franceses o compradores interesados especialmente en la Costa del Sol, como los de países árabes y Suiza. La demanda internacional ha aumentado en el último año, pero según el director de Desarrollo de Negocio y Marketing de Tinsa, Raúl García, aún no es suficiente para la recuperación del sector.