Síntomas negativos en la economía española
"La economía española se está ralentizando, en un contexto internacional cada vez más incierto y complejo"

Escucha la Línea Editorial del jueves 26 de junio
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los datos de la economía española aportados por la Contabilidad Nacional Trimestral confirman que la buena marcha de la economía española se está ralentizando, en un contexto internacional cada vez más incierto y complejo. El crecimiento de nuestra economía, cifrado en el 0,6 por ciento entre enero y junio, es una décima menor que el de los seis trimestres anteriores. Los motores de nuestra economía son el consumo de los hogares junto con la ayuda de la construcción, así como el sector exterior. Sin embargo, se ha frenado el consumo público.
La buena marcha de la economía es el único argumento que puede utilizar Pedro Sánchez en su errática gestión, pero varios síntomas apuntan a la parálisis del Ejecutivo a la hora de diseñar una política económica adecuada ante un más que previsible cambio de ciclo. A la incapacidad de sacar adelante los Presupuetos Generales del Estado se suma la inestabilidad política que está repercutiendo negativamente en la confianza de los inversores extranjeros. España acaba de salir de los diez primeros destinos más confiables para invertir, según el índice de la consultora internacional Kearney. Esta pérdida de confianza se debe a la inseguridad jurídica generada por los cambios normativos en materia fiscal y, sobre todo, en materia laboral, además del aumento de las trabas burocráticas y de la complejidad regulatoria. El incrementeo de las cargas laborales por la subida de las cotizaciones a la Seguridad Social tampoco está facilitando este proceso, que también tiene efectos negativos en la productividad de las empresas españolas. Una situación que es percibida ya negativamente por los españoles según los últimos datos publicados por Funcas.



