El Ayuntamiento de Maracena, localidad granadina de la que es vecina Juana Rivas, ha expresado hoy su "respeto" por la sentencia que la ha condenado a cinco años de cárcel por sustracción de menores, aunque ha calificado el fallo de "desmedido" ante una situación "donde hay precedentes de maltrato".

A través de un comunicado, el consistorio ha recordado que, a lo largo de todo el proceso judicial, ha mostrado su apoyo en reiteradas ocasiones a Rivas, que solicitaba la custodia de sus dos hijos para evitar que se trasladasen a vivir a Italia con su padre, al que había denunciado por malos tratos previamente.

A fecha de hoy, la administración local ha mostrado el "más absoluto respeto" por la resolución judicial condenatoria, que estudiará detenidamente, aunque la considera "desmedida y más ante una situación donde hay precedentes de maltrato".

El Ayuntamiento confía en que la situación se pueda "resolver de la forma más favorable posible para los dos menores afectados", quienes a día de hoy se encuentran con su padre en la isla de Carloforte (Italia).