La Consellería de Cultura de la Xunta de Galicia ha asegurado este martes que "seguirá el mismo procedimiento que en anteriores ocasiones" tras abrir diligencias informativas contra la familia Franco después de que recibiese una denuncia del Ayuntamiento de Sada (A Coruña) por incumplir el régimen de visitas del Pazo de Meirás.

"En 2017 ya impusimos una multa por incumplir el artículo 48 de la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia; fue la primera vez que lo hizo un Gobierno de la Xunta de Galicia", han recordado fuentes de la Consellería consultadas por Efe.

El mismo estipula que las personas propietarias, poseedoras, arrendatarias y, en general, titulares de derechos reales sobre los bienes de interés cultural específicamente declarados permitirán su visita pública gratuita un número mínimo de cuatro días al mes durante, por lo menos, cuatro horas al día, que serán definidos previamente.

El cumplimiento de tal obligación de acceso, además, podrá ser requerido por la consejería competente.

Así las cosas, los Franco, como propietarios de un Bien de Interés Cultural (BIC) como el Pazo de Meirás, deben garantizar merced a tal norma que éste permanezca abierto al público al menos durante cuatro días al mes, una condición que, según ha denunciado en repetidas ocasiones el ayuntamiento sadense, se viene incumpliendo de forma sistemática.

La Xunta abrió ya un expediente sancionador el 14 de marzo de 2017 a Carmen Franco -entonces propietaria del Pazo de Meirás- y, tras constatar el incumplimiento del citado artículo, la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural le impuso siete meses más tarde -el 30 de octubre- una sanción de 4.500 euros.

Esta multa, al ser administrativa y, por lo tanto, nominativa, no pudo ser ejecutada debido al fallecimiento de Carmen Franco el 29 de diciembre de ese mismo año; la hija del dictador había presentado un recurso contra la sanción el 14 de diciembre, si bien éste fue desestimado al haberse registrado fuera del plazo de un mes para presentar alegaciones al expediente.

El conselleiro de Cultura de la Xunta de Galicia, Román Rodríguez, ha recordado en esta misma jornada que aquella sanción, al ser nominativa e intransferible, no pudo ser trasladada a los herederos.

Con respecto al actual procedimiento, el conselleiro ha asegurado a la prensa que la Xunta de Galicia "hace cumplir la ley a todas las familias, independientemente de quienes sean" y que, de confirmarse los hechos denunciados por el Ayuntamiento de Sada, se sancionará a los propietarios "sin ningún tipo de duda".