Representantes de los partidos políticos soberanistas han censurado este martes la "vergüenza" que supone el inicio del juicio a los líderes del "procés" y, tras cuestionar la imparcialidad de la justicia, han avisado que la causa llegará al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, en Estrasburgo.

Así se han expresado en declaraciones a los periodistas antes de que arrancara la concentración unitaria convocada por partidos y entidades Barcelona y en otras localidades catalanas, para protestar por el inicio del juicio del 1-O en el Tribunal Supremo.

El presidente del grupo parlamentario de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha lamentado que "finalmente" se haya visto "la imagen de la vergüenza" del inicio del juicio.

Ha avisado asimismo que la causa llegará a la justicia europea: "No acabarán con nuestros objetivos políticos. No pararemos".

El diputado de la CUP Carles Riera, por su parte, ha sostenido que el inicio de juicio "requiere una respuesta excepcional de desobediencia permanente" y ha reivindicado que "la mejor respuesta a la represión es la lucha en la calle".

"Es hora de que el pueblo se organice y desobedezca", ha añadido, y ha rememorado las votaciones del 1 de octubre: "Nos autodeterminamos y desobedecimos: lo hicimos, lo volveríamos a hacer y lo volveremos a hacer".

La exconsellera y dirigente del PDeCAT Neus Munté ha insistido en las "irregularidades" que, a su juicio, presenta la instrucción de la causa contra los líderes soberanistas y ha llamado a "salir a la calle todos los días que sea preciso" para clamar que ejercer la autodeterminación "no es un delito".

Entre los asistentes se han contado también a representantes de los comunes como los tenientes de alcaldía de Barcelona Gerardo Pissarello y Jaume Asensm, así como miembros del Govern como Elsa Artadi, Pere Aragonès o Laura Borràs.