La quinta ola acecha a España desde las sombras y esta vez lo está haciendo a través de la 'explosión' de contagios e incidencia entre los jóvenes. Esto ha empujado a las comunidades a tomar nuevas medidas restrictivas después de haberse adelantado a su relajación.

Ahora, cuando el ascenso de la curva parece ya imparable, son cada vez más autonomías las que se han lanzado a decretar nuevas restricciones para poder frenar una quinta ola que parece ya inevitable, y que parece estar relativamente 'bajo control' gracias a las medidas que aún continúan en vigor y la campaña de vacunación contra el coronavirus, que desde finales de diciembre de 2020 no ha hecho más que aumentar su ritmo.

La 'quinta ola' sigue en aumento en España

Todo empezó con un ligero aumento de contagios. Al principio no parecía nada reseñable. No obstante, las alarmas saltaron cuando comenzó a subir la incidencia tras estar en tendencia descendente durante más de un mes. La incidencia fue el segundo indicativo que alertaba de lo que estaba por venir. Después llegó un ligero incremento de la ocupación en los hospitales y de los pacientes en las Unidades de Cuidados Intensivos. Y fue así, en una combinación conjunta de todos estos factores, hizo que surgiera la 'tormenta perfecta' para la transmisión del virus entre las franjas de edad más jóvenes.

Tal y como ha adelantado este mismo lunes el director del CCAES, Fernando Simón la incidencia se ha disparado más 51 puntos durante el fin de semana y la media nacional se sitúa en los 368,03 casos por 100.000 habitantes. De hecho, el epidemiólogo ha vaticinado que es muy posible que en solo unos días estemos en unas cifras de incidencia "por encima de los 400 casos por 100.000 habitantes". Solo desde el viernes se han notificado 33.932 nuevos positivos y la presión en los hospitales y las UCI sigue creciendo.

La única cifra reseñable, y que se convierte así en la única esperanza de evitar que la 'quinta ola' se convierta en una curva epidemiológica letal es el número de fallecidos, que están en cifras relativamente bajas y no ha habido grandes cambios en las últimas semanas. Desde el viernes, Sanidad ha notificado 17 fallecimientos a causa de la enfermedad.

La vacunación y las restricciones, la barrera para frenar la quinta ola

Durante este fin de semana, las comunidades no han parado en ningún momento el ritmo de vacunación y se han administrado más de 1.100.000 millones de dosis solo desde el viernes. Precisamente son los datos de vacunación albergan consigo la esperanza. Un 45,9 por ciento de la población (21.789.996 personas) tiene ya la pauta completa de vacunación. Recordamos que el objetivo marcado por el Gobierno de Pedro Sánchez es conseguir que el 70 por ciento de la población esté vacunada a finales del mes de agosto. En este sentido, los expertos también marcan esa cifra, el 70 por ciento de los ciudadanos inmunizados frente al virus, como el punto en el que se podría alcanzar la inmunidad de rebaño.

En cualquier caso, otra de las cifras que arroja algo de luz en esta 'quinta ola' es el número de personas con al menos una dosis, que este lunes ha ascendido hasta el 59 por ciento de la población, que se traduce en 27.994.332 españoles. En este sentido, tampoco podemos olvidar la inoculación de vacunas entre los más jóvenes, como por ejemplo Madrid, que desde el viernes abrió la autocita para los jóvenes nacidos entre 1990 a 1996 y este mismo lunes lo ha hecho para los mayores de 16 años, con lo que se da un paso más para conseguir inmunizar a la población que más se contagia ahora mismo y que está elevando la incidencia media nacional.

Por otro lado, las restricciones se han convertido también en un nuevo escudo. Tras la relajación de muchas medidas restrictivas, entre las que destaca por ejemplo la reapertura del ocio nocturno o el levantamiento del uso obligatorio de las mascarillas en espacios al aire libre. Ahora bien, una batería de medidas que para muchos expertos, se han levantado demasiado pronto y que ahora está mostrando las graves consecuencias, lo cual ha empujado a las comunidades a imponer nuevas medidas para revertir los daños.

En cuanto a las medidas, este lunes el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha aprobado que se aplique de nuevo el toque de queda en 32 localidades de la comunidad, entre las que consta la capital de la autonomía. Cataluña, por su parte, ha anunciado hoy una nueva batería de medidas entre las que destaca el cierre de todas las actividades a las 00:30 horas y se limita el número de personas en las reuniones sociales a diez, que se suman así al cierre del ocio nocturno la semana pasada, como medidas extraordinarias para dar la vuelta a la terrible situación epidemiológica que atraviesa la comunidad.

En cualquier caso, lo que está claro es que la relajación de las medidas tal vez un poco pronto y la irresponsabilidad de muchos españoles, ha lanzado a España a vivir bajo una nueva ola, que en estos momentos solo tiene contra último escudo el paso atrás de las comunidades para imponer nuevas restricciones y el empujón de la campaña de vacunación para conseguir así la inmunidad de rebaño que podría mantenernos a salvo de unas consecuencias sanitarias terribles.