El primer ministro sueco, Stefan Löfven, afirmó hoy en Madrid que, con las largas negociaciones que condujeron a la formación de un gobierno de cuatro partidos en su país, "demostramos que no íbamos a dar el poder, ni se lo daremos nunca, a los extremistas".

En su intervención durante la jornada de clausura de la convención del Partido Socialista Europeo (PES), Löfven dijo que "sabemos que nuestros valores están en peligro en muchos países de nuestro continente".

Por ello, "hay que decir a la población que los extremistas, los nacionalistas no tienen la respuesta. Hay que construir una Europa de solidaridad e igualdad de derechos".

Los resultados electorales en Suecia "fueron muy complicados", manifestó Löfven, quien dijo que "se corría el riesgo de que el bloque extremista llevara a un estancamiento".

Los comicios celebradas en septiembre de 2018 arrojaron un resultado muy parejo entre el bloque de izquierda, del que forma parte el partido socialdemócrata de Löfven, y el bloque conservador, pero se caracterizaron sobre todo por la emergencia del partido de extrema derecha Demócratas Suecos, que pudo haber sido clave de no haberse llegado al pacto entre esos cuatro partidos.

"Por ello -subrayó-, cuatro partidos que no estaban acostumbrados a cooperar, decidimos cooperar, cruzamos los límites y llegamos a una solución", ya que se trataba de "estar en el lado bueno de la historia, defender los derechos humanos; había que poner el limite a los extremistas y decirles 'no pasarán' ".

En esta línea, añadió: "Sabemos que nuestros valores están en peligro en muchos países de nuestro continente", por ello "hay que decirle a la población que los extremistas, los nacionalistas no tienen la respuesta".

Para el gobernante sueco es necesario "construir una Europa de solidaridad e igualdad de derechos", porque la UE "no existe para atender a un mercado, sino para las personas, para los ciudadanos, ellos tienen que estar en el centro y la política tiene que ser capaz de atender sus problemas cotidianos."

"Hombres y mujeres deben disfrutar de las mismas oportunidades. Por eso estoy orgulloso de liderar un gobierno de marcado carácter feminista en Suecia, es algo moral e intelectualmente correcto", recalcó.