El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha pedido hoy recusar al juez Manuel Marchena al considerar que es "el candidato del Partido Popular" y que su juicio se llevará a cabo "sin ninguna garantía", de forma que se suma a las recusaciones ya presentadas por Oriol Junqueras y Raül Romeva.

En unas declaraciones remitidas en un comunicado por Òmnium Cultural, Cuixart ha afirmado que las informaciones sobre el acuerdo entre PSOE y PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) "confirman la politización del máximo órgano de los jueces", el Tribunal Supremo (TS).

Así, ha recordado que aunque el citado magistrado haya renunciado a presidir el TS sí liderará la sala que enjuiciará a los líderes independentistas.

El PP ha anunciado esta mañana que suspende este acuerdo con el PSOE, después de que Marchena haya renunciado a ser candidato para presidir el Tribunal Supremo y el CGPJ, una decisión con la que quiere reivindicar su independencia.

La renuncia de Marchena y el anuncio del PP se producen después de que ayer El Español publicase unos mensajes de Cosidó en los que señalaba que el pacto para renovar el Poder Judicial permitía a su partido controlar "desde detrás" el Supremo.

El comunicado de Òmnium indica que a Cuixart lo juzgará "un tribunal de excepción controlado directamente por el PSOE y el PP", un tribunal -añade- "que ha violentado sus propias normas para juzgar un caso que no le toca".

Es por ello que Òmnium reclama el sobreseimiento de la causa y la "liberación inmediata" de su presidente, así como del resto de dirigentes independentistas encarcelados.

"El juicio a la democracia es una enmienda a la totalidad del régimen del 78. El Estado actual persigue el mismo objetivo que el franquismo: que la democracia se pudra en la cárcel", ha sostenido Cuixart.

La defensa de Cuixart también censura la "incompetencia de la sala segunda del TS" para juzgar al acusado, pues considera que el tribunal competente en este caso debiera ser un Juzgado de Instrucción de Barcelona.

El escrito presentado denuncia, asimismo, el "riesgo de imparcialidad de los jueces", ya que los magistrados del Supremo "no son elegidos exclusivamente por méritos propios", sino que "están nombrados por el CGPJ, a su vez elegido directamente por las cámaras legislativas".

Asimismo, Cuixart señala que será sometido a "una grave vulneración" de sus derechos lingüísticos al ser juzgado en Madrid y no en Cataluña, como asegura que debería ser, por lo que solicita la tramitación íntegra del procedimiento en lengua catalana.

Recuerda, así, que de celebrarse el juicio en Cataluña, éste "permitiría la utilización indistinta del catalán y el castellano" sin que hubiera "ningún obstáculo al pleno uso de cualquiera de las dos lenguas".