El presidente del PP, Pablo Casado, ha propuesto este lunes una ley de apoyo a las familias y de maternidad que contemple, entre otras medidas, una mayor prestación de desempleo a partir del segundo hijo, de forma que la cuantía se incremente cuando lo haga el tamaño de la familia.

Casado ha clausurado una jornada sobre reto demográfico organizada por la Fundación Concordia y Libertad, de su partido. En el cierre también han participado Laura Baena, fundadora del Club Malas Madres; Natalia Peiro, secretaria general de Cáritas, y María José Olestí, directora general de The Family Watch.

"El proyecto del PP para España es la defensa de las familias", ha proclamado Casado. "No se puede aceptar", ha agregado, que las políticas de familia sean "recortar" el complemento de la pensión "a la abuela, un sablazo fiscal a los padres, paro masivo a los hijos y deuda para los nietos".

Como los ejes de su política social ha aludido a la bajada fiscal, la mochila austriaca como fórmula de flexibilidad laboral, un plan de viviendas que sufrague la entrada de una hipoteca a los jóvenes, una reforma educativa, con gratuidad en la enseñanza de 0 a 3 años, y adelgazar la administración mejorando su digitalización.

Casado ha alertado de los problemas demográficos que vive España y de la "fractura generacional". Somos, según el presidente del PP, "la generación más egoísta de la historia" porque "nunca antes se ha dado por bueno que nuestros hijos van a vivir peor que nosotros".

En España mueren más personas de las que nacen, entran más personas a la jubilación que en el mercado laboral y la pensión media es más alta que el salario medio, ha advertido Casado. Es "insostenible" porque pone en riesgo el estado del bienestar.

"Ya no es una cuestión de inviernos demográficos, es una cuestión de que congelan la demografía, por intereses partidistas (...) le parece que no es cool o avanzado hablar de las familias y de cómo las vamos a ayudar", ha sostenido.

Además le parecen "un insulto" debates de "los hijos, las hijas o les hijes" o que se "intente decir que hay que pensar en la España de 2050".

Y ha comparado su ley de maternidad y familia con los planes que Francia hizo en los años 80 o los países nórdicos en los 90, al tiempo que ha sostenido que hay pocos países que no estén teniendo una agenda intensa y con todo el dinero que haga falta para natalidad.