Acoso a la familia de un Policía Nacional en Cataluña: "Le decían a mi hijo que yo pegaba a la gente"
La esposa de David y su hijo han tenido que volver a Galicia por el acoso lingüístico que sufría el menor en el colegio

Acoso a la familia de un Policía Nacional en Cataluña: "Le decían a mi hijo que yo pegaba a la gente"
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
David lleva 12 años trabajando en Barcelona. Nunca había tenido problemas con el catalán, teniendo en cuenta que él es de Galicia y allí también hay una segunda lengua oficial. Todo empezó a cambiar cuando su hijo fue a la escuela. Cada vez había más presión para que el niño hablara catalán, también fuera de clase, lo que provocó en el niño el efecto contrario: se sentía a disgusto y no quería hablarlo, como, por ejemplo, delante de sus padres. Ésta fue una de las razones que provocó que tomaran la decisión de volver a Galicia, donde ahora viven su mujer y el niño.
David ha explicado a COPE que su hijo empezó a escribir y a leer muy rápido, que nunca había tenido problemas de aprendizaje en el colegio, pero siempre había una “notita”, como dice él, por parte del profesorado: el niño tenía que leer más en catalán. Y ya en Galicia, después visitar las instalaciones del primer colegio al que fueron a ver, el niño preguntó al director, a iniciativa propia, “¿puedo hablar en el idioma que quiera o estoy obligado a hablar en gallego? El director, nos explica David, se quedó muy sorprendido, y el pequeño también explicó que en el colegio al que iba antes “la profesora le regañaba o castigaba si no estudiaba catalán”.
Otro de los motivos para dejar Cataluña fue el señalamiento que sufrió el niño por el hecho de que su padre era Policía Nacional. Lo hizo su tutora, poco antes de las vacaciones de Navidad del pasado año. Y todo, porque le vio un marcador de libros de la Policía. Le preguntó si su padre efectivamente era Policía Nacional, le pidió que se pusiera en pie y “delante de toda la clase dijo que su padre pegaba a la gente” y que “ella tenía miedo a la policía”. A partir de ahí el niño cada vez se sintió peor y “nos dijo que no quería volver al colegio”. La profesora reconoció los hechos, aunque sólo tuvo una advertencia verbal.
En cualquier caso, no era la primera vez que vivía una situación así en la escuela. Al día siguiente del referéndum ilegal, en 2017, y cuando tenía cinco años, en la colegio “se dijo que la policía era mala porque pegaba a personas que no habían hecho nada” y también se hizo una concentración de rechazo a la violencia policial.
Por todas estas situaciones llevaron al niño a estar cada vez más a disgusto, hasta el punto de que la mujer de David tuvo que pedir el traslado de trabajo. David lamenta la situación que debe vivir ahora, separado de su familia, y todo, añade, porque hay unas instituciones en Cataluña que no les protegen. De hecho, dice, existe la sensación de que aquí se puede hacer lo que se quiera porque no habrá consecuencias.